Cerca de 48.000 extranjeros en situación irregular en Francia han sido colocados en 2015 en retención administrativa, según asociaciones que lamentan "prácticas excesivas", en especial en Calais (norte), donde afluyen numerosos migrantes que intentan pasar a Reino Unido.
El año pasado, 47.565 personas fueron colocadas en retención administrativa, según el informe anual de las asociaciones habilitadas para intervenir en estos centros de retención (CRA). En 2014 habían sido un poco más, 49.537.
Pero en "estos cinco últimos años, Francia se ha destacado por un uso masivo de encierro de personas extranjeras con vistas a ser alejadas" del país. En ese período hubo 230.000 personas retenidas, según el informe.
La retención administrativa permite detener a un extranjero, contra el que se ha dictado orden de alejamiento del país, a la espera de ser expulsado.
Las asociaciones critican particularmente "la operación de magnitud sin precedentes" llevada a cabo en el último trimestre de 2015 en Calais donde "más de 1.100 personas fueron detenidas y luego diseminadas en centros de retención", pese a que muchas de ellas no podían ser expulsadas.
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