EUROPA PRESS
Según informa el Ministerio Fiscal en una nota de prensa, la acusada comenzó a trabajar en el domicilio de la anciana en febrero de 2012. La Fiscalía sostiene que la acusada, en repetidas ocasiones, "propinó a la mujer empujones y bofetadas, le gritaba, le tiraba del pelo, la zarandeaba o la sujetaba con fuerza por la mandíbula, sin que precisara asistencia facultativa".
A ello se sumaba un maltrato verbal que provocaba en la mujer, de 85 años, "temor y llanto frecuente", hasta que el día 14 de mayo de 2013, la hija de la mujer, al enterarse de lo sucedido, prescindió de sus servicios.
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