La normativa vigente es la Ley estatal 1/1970, y el Govern considera que ha quedado "anticuada y desfasada" y que hay que adecuarla a las nuevas necesidades sociales, económicas y ambientales.
Quiere que la nueva ley catalana preste especial atención a los equilibrios entre las diferentes actividades y a la prevención de riesgos y perjuicios originados por las sobrepoblaciones de algunas especies cinegéticas.
Para impulsarla quiere contar con el consenso y participación de los principales sectores implicados, por lo que este miércoles han mantenido una reunión en Vic (Barcelona) y el miércoles que viene se realizará en Valls (Tarragona) con agentes del sector.
La directora general de Bosques, Montse Barniol, ha presidido esta sesión informativa en Vic y ha considerado que "hay que replantear el papel de la caza como herramienta eficaz para la gestión de la biodiversidad, los ecosistemas forestales y la fauna salvaje".
Hasta hoy, la actividad cinegética está diseñada legislativamente como una actividad de ocio y ahora la Generalitat plantea la necesidad de incorporar el control de daños y la gestión del medio ambiente.
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