Autoridades alegan que un monje inmolado se suicidó porque tenía una amante

Pekín, 10 ene.- Las autoridades de la provincia china de Qinghai (oeste), donde el pasado domingo se suicidó un monje quemándose a lo bonzo, aseguraron que éste se inmoló al descubrirse que tenía una relación amorosa con una mujer casada, destacó la agencia oficial Xinhua.

Según las primeras investigaciones de la policía local, Nyage Sonamdrugyu, de 40 años y "buda viviente", se quitó la vida después de que el marido de su amante descubriera la relación.

Sonamdrugyu pertenecía a la secta budista gelugpa, una de las mayoritarias entre los tibetanos y una de las más estrictas con sus miembros, a los que requiere castidad.

El monje se inmoló a las 4:19 hora local del domingo (22:19 GMT del sábado) en una calle de la localidad de Gyumai, en la comarca de Darlag.

Tras el suceso, cientos de vecinos de la zona, habitada mayoritariamente por tibetanos, se concentraron en el lugar del suicidio, e incluso algunas informaciones señalan que pasearon el cuerpo del monje inmolado por la ciudad, como muestra de apoyo.

Es el decimoquinto suicidio "a lo bonzo" de miembros de la etnia tibetana desde 2011, aunque es el primer caso que se produce en la provincia de Qinghai, región natal del actual Dalai Lama.

Grupos tibetanos en el exilio aseguran que estas inmolaciones son producto de la desesperación de ese pueblo por la represión de su religión y su cultura que sufre en China, pero las autoridades chinas han alegado otras razones más personales en algunos casos.

En otra de las inmolaciones ocurridas la semana pasada, cuando murió otro monje y uno resultó herido, la policía acusó a ambos de haber intentado robar una preciada estatua de Buda y cometer el suicidio al ser descubiertos.

Sin embargo, los tibetanos en el exilio aseguran que muchos de los monjes gritaron consignas a favor del Dalai Lama o pidiendo la libertad para el Tíbet antes de intentar quitarse la vida.

China asegura que el Tíbet es desde hace siglos parte inseparable de su territorio, mientras que los tibetanos argumentan que la región fue, durante mucho tiempo, virtualmente independiente hasta que fue ocupada por las tropas comunistas, en 1951.