Cáritas Española destina 220.000 euros para emergencias en países asiáticos

Madrid, 21 nov.- Cáritas Española ha destinado 220.000 euros a los llamamientos de ayuda de emergencia lanzados desde sus oficinas de Camboya, Filipinas, Tailandia, India y Bangladesh para socorrer a los millones de afectados por las inundaciones que desde el verano han asolado a esos países asiáticos.

Cáritas Española ha activado las campañas "Cáritas con el Sudeste Asiático" y "Cáritas con Asia" con diferentes aportaciones, de acuerdo a las necesidades y al volumen de la población afectada.

Para las inundaciones de Camboya se ha realizado una aportación inicial de 20.000 euros, que se destinará a cubrir las necesidades básicas de 7.000 familias, mientras, para la emergencia declarada en Filipinas se ha contribuido con 100.000 euros, para programas de asistencia urgente para 10.200 familias.

Para Tailandia, Cáritas Española ha comprometido 30.000 euros para responder a una primera fase de la emergencia, 50.000 euros para Bangladesh, mientras que para la emergencia en el Estado indio de Orissa se destinan otros 20.000 euros.

La ONG católica explica que en Camboya las primeras evaluaciones de daños de las inundaciones que afectan desde el pasado mes de septiembre confirman 148 víctimas mortales, cientos de heridos y 176.625 familias afectadas.

Desde el pasado 27 de septiembre las Islas Filipinas se han visto asoladas por la llegada de dos tifones, "Nesat" y "Nalgae", que han afectado gravemente al menos a 843.000 familias, indica.

Las inundaciones en Tailandia -que comenzaron en julio- afectan a unos 9,5 millones de personas, que viven 63 de las 77 provincias del país, y se han cobrado la vida de más de 500 personas.

Las severas inundaciones que han sufrido 20 distritos del Estado de Orissa, en India, han afectado a más de 6.000 localidades, con una población de casi cuatro millones de personas damnificadas.

Las incesantes lluvias monzónicas caídas sobre Bangladesh desde finales de julio han causado graves daños en 13 de los 64 distritos del país, donde más de la mitad de la población ha tenido que abandonar sus casas, concluye la ONG.