Comunidad gay paraguaya reivindica el espacio público con el "besatón"

  • Unas 50 personas participaron hoy en Asunción en el "besatón", un maratón de besos que por cuarto año consecutivo se celebra frente al edificio del Congreso para denunciar la discriminación que sufren las personas homosexuales, bisexuales y transexuales en Paraguay.

Asunción, 16 may.- Unas 50 personas participaron hoy en Asunción en el "besatón", un maratón de besos que por cuarto año consecutivo se celebra frente al edificio del Congreso para denunciar la discriminación que sufren las personas homosexuales, bisexuales y transexuales en Paraguay.

En un ambiente festivo y con gran presencia de los medios de comunicación, los activistas, en su mayoría jóvenes, se besaron en diferentes tandas mientras eran vitoreados por simpatizantes de la causa.

Ramón Cazal, dirigente de Somosgay, dijo a Efe que cada año que se celebra el "besatón" supone un avance en las reivindicaciones del colectivo homosexual, ya que en sus inicios las autoridades intentaron ilegalizar el acto.

"Cuando empezamos en 2010 el Congreso planteó prohibir las expresiones públicas de parejas del mismo sexo, que se votó en contra. Y al año siguiente la intendencia de Asunción intentó emitir una ordenanza similar sin éxito", indicó Cazal.

El activista señaló que ese tipo de convocatorias son una muestra de que quienes "se apartan de la norma heterosexual" en Paraguay están ganando los espacios públicos, aunque, a su juicio, la sociedad paraguaya sigue estando plagada de prejuicios.

"El paraguayo medio tiene bastantes prejuicios sobre el homosexual. Le mira como alguien que padece una enfermedad, esa es la idea que está instalada en la sociedad. Pero si tenemos en cuenta que ya no lo consideran un pecado, se puede decir que se ha dado un avance", observó.

Respecto a la clase política, Cazal señaló que ha pasado de rechazar e intentar penar las conductas homosexuales a hacer como si no existieran.

"La clase política en general es muy hipócrita. En conversaciones privadas con nosotros se muestran comprensivos, pero en la práctica eluden el asunto", indicó el activista.

Cazal destacó como contraste la franqueza del presidente paraguayo, Horacio Cartes, en 2013, que durante la campaña electoral realizó unas declaraciones homofóbicas que causaron un gran revuelo.

"Dijo que se pegaba un tiro en los genitales si un hijo suyo le salía homosexual", recordó Cazal.

Según Cazal, esas expresiones reflejan la postura de su formación política, el Partido Colorado, organización que fue la base política de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989).

"Durante la dictadura hubo una persecución social y judicial contra los homosexuales. Hoy esto ha cambiado, pero todavía perviven ciertas actitudes", concluyó Cazal.

El Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia recuerda cuando el 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud (OMS) dejó de considerar la homosexualidad una enfermedad.

Mostrar comentarios