San Sebastián, 17 feb.- Un hombre que amenazó de muerte a su pareja con un cuchillo de cocina en presencia de la hija de la mujer, de cinco años de edad, ha sido condenado a penas que suman tres años y dos meses de cárcel como autor de un delito de violencia física y psíquica habitual y otro de lesiones.
Según la sentencia del caso, a la que hoy ha tenido acceso EFE, los hechos se produjeron durante el período de tres meses que la pareja convivió en un piso de Pasaia (Gipuzkoa), junto a la hija de la mujer.
La resolución judicial explica que a lo largo de este tiempo se produjeron numerosas discusiones en las que el acusado agredió a su víctima "empujándola, agarrándola del brazo, dándole patadas", a la vez que la insultaba diciéndole: "Eres un escombro de mujer, puta gorda, hija de puta, golfa".
Además, cuando la perjudicada "trataba de quedar con sus amigas" el imputado le acusaba de ir "a zorrear", entre otras expresiones despectivas, lo que llevaba a la mujer a "desistir" de quedar con ellas.
En otros momentos, el procesado amenazaba a su pareja con quitarle la custodia de su hija y le advertía de que se iba a quedar "sin la niña".
La sentencia concreta un hecho ocurrido el 14 de septiembre de 2012, cuando, una vez concluida la convivencia, el hombre acudió al domicilio en el que seguía residiendo la perjudicada con su hija para exigirle que "le abonara la mitad del importe del alquiler del inmueble que abonaban a partes iguales" y como la mujer se negó "le propinó un tortazo en la cara y la agarró del cuello".
A continuación, cogió un cuchillo de cocina y le amenazó con matarla y clavárselo "ahí mismo", en presencia de la niña que entonces tenía cinco años.
Posteriormente, "ante la negativa" de la mujer a darle el dinero, el encausado se llevó un ordenador y unas planchas de peluquería y se marchó, al tiempo que decía a su expareja que si le denunciaba se lo haría "pagar muy caro" porque le iba a quitar la custodia de la pequeña.
La sentencia considera ahora al imputado responsable de un delito de violencia física y psíquica habitual y otro de lesiones, así como de una falta continuada de injurias, otra de amenazas y una tercera de maltrato de obra, por las que le impone penas que suman tres años y dos meses de cárcel, y 18 días de localización permanente.
Asimismo, el hombre no podrá acercarse a la perjudicada ni comunicarse con ella durante cinco años y deberá indemnizarle con cuatro mil euros más los correspondientes intereses legales.
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