Dos tercios de los muertos por las riadas en Filipinas siguen sin identificar

  • Diez días después de las riadas ocurridas al sur de Filipinas, más de dos tercios de los 1.236 cadáveres recuperados entre los escombros, en los ríos y en el mar siguen sin ser identificados, indicaron hoy fuentes oficiales.

Manila, 26 dic.- Diez días después de las riadas ocurridas al sur de Filipinas, más de dos tercios de los 1.236 cadáveres recuperados entre los escombros, en los ríos y en el mar siguen sin ser identificados, indicaron hoy fuentes oficiales.

"Alrededor de dos tercios de los cuerpos siguen sin identificar. Hemos parado de contar a los desaparecidos porque no sabemos de quiénes son los cuerpos que encontramos. Tenemos un sistema basado en las huellas dactilares para que las familias los reclamen más tarde", afirmó Benito Ramos, director del Centro Nacional de Prevención de Desastres.

La cifra oficial de desaparecidos es de 1.079, pero las propias autoridades han dudado de que el dato sea fiable al haber tantos cadáveres sin reconocer.

Los equipos de rescate, que continúan recuperando cuerpos en el mar con la ayuda de pescadores, han tenido que ampliar su radio de búsqueda, ya que ayer aparecieron 150 cadáveres a más de 100 kilómetros de las dos ciudades más afectadas, Iligan y Cagayan de Oro.

Según los datos oficiales, 60.430 personas pasaron la Navidad hacinadas y en condiciones insalubres en los 53 centros de evacuación repartidos por las localidades afectadas de la isla de Mindanao.

Otros 309.974 damnificados reciben asistencia fuera de los refugios, que no tienen suficiente espacio para cobijar a las casi 40.000 familias cuyas casas quedaron parcial o totalmente destruidas.

Miles de familias no pueden regresar al lugar donde tenían sus hogares, pues el Gobierno ha prohibido la construcción cerca de los lechos de los ríos para evitar futuras tragedias.

"El problema es que la mayor parte de las familias no tienen hogares a los que regresar ni pertenencias. Tenemos que apoyarles hasta que encontremos un lugar en el que puedan reinstalarse, las autoridades locales están buscando una solución", señaló Ramos.

La tormenta tropical golpeó la región, sobre todo las ciudades de Cagayan de Oro e Ilican, entre la madrugada del pasado viernes y la mañana del sábado y dejó un reguero de destrucción en 13 provincias.

Los daños causados por la tormenta ascienden 1.082 millones de pesos (19,09 millones de euros o 24,9 millones de dólares), principalmente en carreteras, puentes, hospitales y escuelas.

Los expertos de las agencias internacionales identifican el chabolismo como el principal factor del gran número de muertos que causan en el país los desastres naturales y que evidencian el mal estado de las infraestructuras.

La incontrolada deforestación también favorece las riadas y avalanchas de tierra que son frecuentes durante la estación lluviosa que por lo general comienza en mayo y concluye en noviembre.

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