El ejército israelí admitió este martes que podía haber matado por error a un adolescente palestino de 15 años, al disparar contra personas que lanzaban piedras y cócteles molotov en Cisjordania ocupada.
Mahmud Badran murió bajo las balas de los soldados israelíes y otros cuatro palestinos resultaron heridos en la carretera 443, informó la agencia de prensa palestina Wafa.
Los soldados israelíes dispararon para hacer cesar los ataques con piedras y artefactos incendiarios contra vehículos que circulaban por la 443 cerca de la localidad de Beit Sira en Cisjordania, indicó el ejército.
En un primer momento, el ejército israelí había afirmado que Mahmud Badran y los cuatro heridos tiraban piedras y cócteles molotov en una carretera de Cisjordania ocupada por donde circulan israelíes.
Sin embargo, por la mañana, una portavoz del ejército israelí dijo a la AFP que "según los primeros elementos de la investigación, parece que peatones ajenos a los incidentes fueron alcanzados por error".
El adolescente muerto formaba parte de los "peatones" al igual que los heridos, señaló la portavoz, que dio cuenta de dos detenciones.
La carretera 443, donde se producen incidentes frecuentes, es utilizada por los israelíes para circular entre Jerusalén y Tel Aviv.
La carretera, estrechamente vigilada por las fuerzas de seguridad israelíes, transcurre durante unos 12 km dentro de Cisjordania, territorio palestino ocupado desde hace casi 50 años.
Jóvenes palestinos se apostan a menudo en las localidades y ciudades cercanas ubicadas al borde de la carretera para lanzar proyectiles contra los vehículos con matrícula israelí.
El ministerio palestino de Salud informó por su parte que el ejército israelí había matado a un joven y herido a cuatro, de los cuales tres se encuentran en un estado grave.
El ministerio palestino de Relaciones Exteriores denunció un "crimen odioso". Es una "nueva prueba de que el gobierno de [Benjamin] Netanyahu es un gobierno de extremistas que cada día aplica el peor terrorismo de estado contra el pueblo palestino".
Se ignora la razón de la presencia de Badran y de los heridos en el lugar de los hechos. Es algo corriente que durante el ramadán los residentes palestinos trasnochen tras la ruptura del ayuno.
Los organismos de derechos humanos acusan a Israel de usar de forma excesiva la fuerza contra los palestinos.
En septiembre pasado, el primer ministro Benjamin Netanyahu prometió que iba a hacerles "la guerra" a los lanzadores de piedras después de la muerte de un israelí en un accidente causado, según las autoridades, por una pedrada.
Durante la noche, soldados israelíes destruyeron la vivienda de la familia de un palestino abatido en marzo después de un ataque con un cuchillo durante la visita del vicepresidente estadounidense Joe Biden en Israel, informó el ejército israelí.
El 8 de marzo pasado, Bashar Masalha, 22 años, mató a un turista estadounidense de 29 años e hirió a varios israelíes en un barrio turístico de Tel Aviv.
Las tropas israelíes destruyeron el apartamento de la familia, ubicado en el segundo piso de un edificio de tres, en la localidad de Haja, norte de Cisjordania.
El gobierno justifica las destrucciones de vivienda en aras de terminar la actual ola de violencia, aunque algunos responsables de las fuerzas de seguridad cuestionan su eficacia.
Organizaciones de defensa de los derechos humanos critican la destrucción de viviendas, que constituyen una castigo colectivo y afecta duramente a las familias.
Desde que comenzó el actual ciclo de violencia en Israel y los Territorios Palestinos han muerto al menos 209 palestinos, 32 israelíes, dos estadounidenses, un eritreo y un sudanés, según un recuento de la AFP.
Según las autoridades israelíes, la mayoría de estos palestinos murieron al llevar a cabo ataques con cuchillos y armas de fuego o bien lanzando sus vehículos contra transeúntes.
Otros fallecieron en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, o bien víctimas de ataques aéreos israelíes en la Franja de Gaza.
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