El 83 % de los españoles presos en el extranjero fue detenido por drogas

  • El 83,4 por ciento (un total de 2.009) de los españoles que están recluidos en cárceles extranjeras, es decir cuatro de cada cinco, fueron detenidos por asuntos relacionados con las drogas, bien por consumir, por traficar o por comprar.

Madrid, 4 jul.- El 83,4 por ciento (un total de 2.009) de los españoles que están recluidos en cárceles extranjeras, es decir cuatro de cada cinco, fueron detenidos por asuntos relacionados con las drogas, bien por consumir, por traficar o por comprar.

Ante esta cifra, que no obstante se ha reducido en un centenar de personas desde el pasado mes de diciembre, responsables de los Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Justicia y Asuntos Exteriores, además del Instituto Ramón Rubial, han lanzado una campaña para advertir a los españoles que viajan al extranjero en verano de los riesgos de consumir o de traficar con drogas.

De los 2.009 españoles que, con fecha del pasado 30 de junio, cumplen condena en el extranjero por drogas, el 29 % lo hace en países europeos, aunque el ránking de países donde hay más presos españoles cumpliendo condena por asuntos relacionados con los estupefacientes son Perú (271), Colombia (192), Italia (191), Brasil (178) y Marruecos (154).

A estos países le siguen Portugal (133), Argentina (122), Ecuador (118) y Francia (114), según ha señalado hoy en rueda de prensa el delegado del Plan Nacional sobre Drogas, Francisco de Asís Babín.

De Asís ha advertido a los jóvenes viajeros de las "consecuencias negativas" que pueden sufrir si consumen estupefacientes en determinados países.

"En España se distingue entre el consumo y tráfico de drogas, pero en otros muchos países no se hace esta distinción y ambas prácticas se penalizan con cárcel", ha subrayado De Asís, quien ha incidido en esta idea porque la percepción del riesgo del consumo baja en España.

Viajar con esa percepción, de la que "no pasa nada por consumir", es peligroso, según De Asís, quien ha aconsejado a los ciudadanos que vayan a viajar fuera que se informen de las circunstancias del país, porque pueden terminar como los 2.009 españoles detenidos en el exterior por drogas, del total de 2.426 que se encuentran arrestados en cárceles extranjeras.

Incluso en países como Thailandia, los delitos por drogas se castigan hasta con pena de muerte.

"No compres, ni consumas, ni trafiques con drogas en el extranjero" es el enunciado de la campaña que ha puesto en marcha el Ejecutivo, y que este año tiene por lema: "Si te has creído que pasar droga es la solución a tus problemas, te puedes creer todo lo demás".

La campaña utiliza los mismos materiales divulgativos del pasado año, y para su difusión se han editado 1.000 carteles que se mostrarán en estaciones de tren, aeropuertos y oficinas donde se expiden pasaportes, además de 80.000 postales.

Esta iniciativa, que se lleva realizando desde el año 2000, tiene como objetivo concienciar a la población que viaja de los riesgos que corren al tomar cualquier tipo de contacto con las drogas, y disuadir a los que tratan de introducirlas en otros países pensando que de esta forma van a poder obtener un rápido beneficio.

No hay un perfil único sobre los detenidos por drogas en el exterior, según los responsables del Plan, pero sí se puede decir que la mayoría de ellos son hombres y que tienen entre 25 y 35 años.

El subdirector general de Protección y Asistencia Consular del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, Juan Bosco, ha destacado las diferencias entre las cárceles de Occidente y de otros países y ha hecho hincapié en las garantías que disfrutan los presos en Europa.

Unas situaciones que comprobó en varias ocasiones desde el consulado en París: por ejemplo, la que se produjo cuando un joven español fue detenido en el aeropuerto galo al detectarle droga en su interior. Lo constató una prueba médica que también determinó que sufría una enfermedad grave, por lo que fue traslado a un hospital para que recibiera quimioterapia con urgencia.

Y cuando los españoles son condenados en el exterior en sentencia firme pueden solicitar su traslado a una cárcel española, algo que hacen en su mayoría, pero desde el arresto hasta llegar a esa situación pueden transcurrir tres años.

Así lo ha indicado Jimena Sanclemente, directora del Instituto Rubiales, una entidad que lleva más de veinte años trabajando en la atención a los españoles en el exterior, quien ha alertado a los viajeros para que no se dejen engañar por las mafias si les ofrecen ganar dinero pasando algo de droga.

Para que se puedan producir esos traslados, España tiene firmados tratados internacionales bilaterales y multilaterales con 90 países, según el director general de Cooperación Internacional del Ministerio de Justicia, Angel Llorente.

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