El alcalde de Daimiel dice que las aguas vertidas al Guadiana han sido previamente depuradas

  • Daimiel (Ciudad Real).- El alcalde de Daimiel, José Díaz del Campo, ha declarado a Efe que las aguas residuales que está vertiendo el consistorio desde la planta depuradora al río Guadiana han sido previamente depuradas, en contra de lo afirmado por la organización conservacionista Ecologistas en Acción.

EA denuncia al Ayuntamiento de Daimiel por verter agua contaminada en el acuífero 23
EA denuncia al Ayuntamiento de Daimiel por verter agua contaminada en el acuífero 23

Daimiel (Ciudad Real).- El alcalde de Daimiel, José Díaz del Campo, ha declarado a Efe que las aguas residuales que está vertiendo el consistorio desde la planta depuradora al río Guadiana han sido previamente depuradas, en contra de lo afirmado por la organización conservacionista Ecologistas en Acción.

El edil ha rebatido las denuncias que han presentado los ecologistas ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil y ha asegurado que la planta depuradora "trabaja al cien por cien de su capacidad para que todas las aguas que pasan por ella vayan en las mejores condiciones posibles", en este caso, al río Guadiana.

Díaz del Campo ha señalado que las últimas precipitaciones registradas en la comarca, que han superado en veinte días los 270 litros por metro cuadrado, han provocado que el vaso de la Laguna de Navaseca, donde tradicionalmente vierte el agua de la depuradora municipal, se encuentre lleno.

Esta circunstancia ha obligado al Ayuntamiento a utilizar canales que tradicionalmente vertían el agua antes de hacerlo en la laguna de Navaseca, para volver a desviar el agua tratada en la depuradora hasta el cauce del río.

El alcalde de Daimiel ha señalado que estas aguas, en todo caso, han sido tratadas previamente y así lo ha podido constatar la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), que "está realizando análisis constantes", ha dicho.

Díaz del Campo ha reconocido que, en el caso de las aguas pluviales, se pueden verter sin ser tratadas, ante la imposibilidad de la capacidad de tratamiento de la depuradora.

En este sentido, ha advertido que la depuradora tiene capacidad para tratar 8.000 metros cúbicos al día, si bien, en algunos momentos, como consecuencia de las elevadas precipitaciones, le ha llegado a entrar 16.000 metros cúbicos al día, lo que ha obligado a realizar el vertido de las aguas pluviales.

Ha indicado también que se trata de una situación "excepcional", que se hubiera producido, incluso, si hubieran existido tanques o balsas de tormenta, como han reclamado los ecologistas.

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