Un mundo de contrastes. Esta instantánea, tomada ayer por el fotógrafo Manu Fernández durante las manifestaciones del 1 de mayo en Barcelona para la agencia AP, ha incendiado las redes sociales y ha abierto el debate sobre los límites de la frivolidad.
La autofoto, que muestra a dos turistas ante un contenedor en llamas en plena calle, ha dado la vuelta al mundo y ha llegado incluso al "Wall Street Journal". Su comunity manager se planteaba hoy que "los selfies de turistas pueden haber alcanzado un nuevo mínimo". Incluso el periódico "Arab News" la ha publicado.
La instantánea ha circulado también con rapidez en Facebook y Twitter, acompañada de críticas y comentarios irónicos. La imagen es similar a la ganadora del premio Wall Press Photo, en 2007. En ella se podía ver un coche descapotable de lujo con jóvenes bien vestidos tomando fotos con el móvil paseando ante un edificio derruido en un barrio del sur de Beirut.
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