El Reino Unido superará los 70 millones de habitantes por la inmigración

  • La población del Reino Unido puede llegar a los 73,2 millones en los próximos 25 años por el fuerte incremento de la inmigración, según datos divulgados hoy por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, siglas en inglés).

Londres, 26 oct.- La población del Reino Unido puede llegar a los 73,2 millones en los próximos 25 años por el fuerte incremento de la inmigración, según datos divulgados hoy por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, siglas en inglés).

La población británica está estimada actualmente en 67,2 millones, pero casi la mitad del ascenso demográfico en los próximos años responderá al aumento de inmigrantes.

En términos porcentuales, el 44 % del ascenso será por el ingreso de extranjeros y el 56 % por un aumento natural de la población pues habrá más nacimientos que muertes.

El secretario de Estado de Inmigración, Damian Green, dijo hoy que el nivel de inmigración en el Reino Unido ha sido muy alto.

"Es por ello que hemos hecho cambios radicales para obtener un control de la inmigración en este país, cerrando rutas sujetas a los abusos y tomando medidas contra los que no tienen derecho a estar aquí", afirmó Green.

De acuerdo con los datos de la ONS, 1,4 millones de personas tienen 85 años o más, pero se estima que esta población anciana llegue a 1,9 millones en el 2020 y a 3,5 millones en 2035.

Además, según los cálculos oficiales, el número de personas que superen los 90 años se triplicará en 2035, cuando la cantidad de ciudadanos con pensión estatal está estimada en 15,6 millones debido a la gran población nacida después de la II Guerra Mundial y en los pasados años 60, en la década del "baby-boom".

La ONS señala que la población activa británica -entre 16 y 65 años- pasará de los 38,5 millones en 2010 a 44,7 millones en 2035.

La Oficina de Estadísticas calcula que el número de ciudadanos con al menos cien años pasará de 13.000 en 2010 a 110.000 en 2035.

En los últimos años, el Reino Unido empezó a aplicar un sistema de puntos, similar al utilizado en Australia, como medida para controlar la inmigración, que consiste en permitir únicamente el ingreso de no comunitarios cuyos trabajos son necesarios y no pueden ser realizados por ciudadanos británicos.

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