Española consigue recuperar a sus hijas "retenidas" en Marruecos por el padre

Madrid, 26 mar.- Una mujer española, María Dolores B., ha conseguido recuperar a sus dos hijas, de dos y tres años, después de que el padre de éstas, un español de origen marroquí, se las llevara a Marruecos sin su consentimiento hace siete meses bajo la amenaza de que no volvería a verlas.

Así lo ha relatado la mujer en declaraciones a Efe, en las que ha asegurado que la "liberación" de las niñas ha sido posible gracias a la ayuda de la Asociación de Amigos del Pueblo Marroquí "Itran", a la que acudió después de haberlo hecho a varias instancias oficiales, que según ha dicho, no la ayudaron.

Su "calvario" comenzó cuando un día de septiembre, su expareja que tiene una sentencia condenatoria que no es firme por violencia de género y una orden de alejamiento en vigor en España, aprovechó una de las visitas a sus hijas para llevárselas a Marruecos, según ha afirmado María Dolores.

Desde ese momento, él, que se encontraba en la ciudad marroquí de Meknés, se puso en contacto con la mujer para pedirle dinero a cambio de poder ver a sus hijas, y a pesar de que ésta se lo envió en varias ocasiones, él no le devolvió a las pequeñas, según ha dicho también a Efe el presidente de la asociación, Alami Susi.

Después de solicitar ayuda a instancias oficiales, María Dolores recurrió a la asociación y así junto con varios miembros de ésta viajó a Marruecos para conseguir que sus hijas volvieran con ella a España.

La mujer y la asociación contactaron con la embajada española en Rabat y con el juez español de enlace en aquel país para exponerles el caso.

Finalmente, localizaron al hombre y ella le instó a que quedaran los dos a solas para verse, un encuentro que aprovechó la policía judicial marroquí para detenerle, si bien él no dijo donde se encontraban las niñas hasta el día siguiente.

Una vez que el hombre reveló el paradero de las pequeñas, fueron a buscarlas y vieron que una de ellas tenía la clavícula rota, una lesión de la que María Dolores desconoce cómo se produjo: "ella me dijo que se cayó, pero yo el miércoles he pedido hora con el pediatra para que la haga un examen exhaustivo", ha indicado.

El "calvario" no concluyó ahí, sino que, según la mujer, el cónsul español en Marruecos en lugar de acompañarla al aeropuerto con las niñas, "las metió en un coche con un conductor que no hablaba español y las dejó tiradas en el aeropuerto".

El problema surgió cuando la policía marroquí impidió en un primer momento a la mujer y a sus hijas viajar de vuelta a España porque "no entendía el salvoconducto" que las daba el permiso para hacerlo.

La policía de ese país permitió a María Dolores hablar con el juez de enlace, quien solucionó el conflicto y así las tres pudieron volar de vuelta a Madrid, donde llegaron el pasado sábado.

Ahora, el temor de María Dolores es que su expareja venga a España y ella no tenga protección.

Ella junto con la asociación quieren reunirse con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para que "ninguna mujer vuelva a sufrir lo que ella ha sufrido".