Evacúan en Bolivia a 185 familias por inundación en límites con Brasil y Perú

  • Unas 185 familias de la región boliviana de Pando, en la frontera con Brasil y Perú, fueron evacuadas debido al desbordamiento del río Acre a causa de las intensas lluvias en esa zona en los últimos días, informaron hoy fuentes oficiales.

La Paz, 19 feb.- Unas 185 familias de la región boliviana de Pando, en la frontera con Brasil y Perú, fueron evacuadas debido al desbordamiento del río Acre a causa de las intensas lluvias en esa zona en los últimos días, informaron hoy fuentes oficiales.

Las aguas del Acre inundaron varios barrios de Cobija, capital de Pando, por lo que 150 familias tuvieron que evacuar sus casas y fueron instaladas en escuelas, dijo a la radio estatal el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.

Otras 35 familias de Bolpebra, un pueblo situado en la frontera con Brasil y Perú, también tuvieron que abandonar sus viviendas, según un reporte del viceministerio de Defensa Civil.

Quintana y el viceministro de Defensa Civil, Oscar Cabrera, llevaron hoy alimentos, carpas y colchones a Pando, donde la situación "es bastante dramática", señaló el ministro.

El informe de Defensa Civil señala también que ya suman nueve fallecidos y más de 8.100 familias afectadas en los dos últimos meses en Bolivia por lluvias que causaron derrumbes y desbordamientos en las nueve regiones del país.

Las lluvias ocasionaron cinco muertes en La Paz, tres en la región oriental de Santa Cruz y una en la sureña Chuquisaca.

Las regiones con más familias damnificadas por la temporada de lluvias son La Paz (1.640), Cochabamba (1.627), Oruro (1.578), Potosí (1.461) y Chuquisaca (1.201).

El viceministro Cabrera dijo al canal estatal que por el momento no hay necesidad de declarar la emergencia nacional ni de pedir ayuda internacional, aunque no descartó hacerlo si las lluvias se intensifican en los próximos días.

Las autoridades disponen de 5,7 millones de dólares y más de 1.700 toneladas de alimentos para atender las emergencias.

La temporada de lluvias trajo, como todos los años, un repunte de la endemia de dengue, que ha dejado 16 fallecidos desde octubre y 1.600 infectados, sobre todo en el oriente y el sur de Bolivia, donde están en alerta sanitaria Santa Cruz, Beni y Tarija.

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