Miami (EE.UU.), 15 ago.- El grupo del exilio cubano en Miami (Florida) Movimiento Democracia denunció hoy que el Gobierno de Bahamas ha deportado a Cuba a 24 refugiados que estaban detenidos en ese país caribeño, muchos de los cuales habían recibido ya la concesión de asilo por parte de Panamá.
"En una acción engañosa y con la intención de ocultar la tortura de seres humanos, el primer ministro de Bahamas, Perry Christie, ha repatriado de forma sorprendente a 24 cubanos a Cuba, muchos de los cuales habían recibido ya el visado para viajar a Panamá", señaló en un comunicado esta organización del exilio.
El Movimiento Democracia acusó a Christie de "faltar a su palabra con la intención de ocultar que los detenidos habían sido gravemente torturados por un grupo de guardias" del Centro de Detención de Inmigrantes de Nassau, capital de Bahamas.
El pasado domingo, el Gobierno de Panamá había concedido "asilo territorial" por razones humanitarias a 19 inmigrantes indocumentados presos en el citado centro de detención, tras recibir la solicitud de este grupo.
Este anuncio coincidió con el compromiso del Gobierno de Bahamas de acabar con el maltrato a los inmigrantes indocumentados que llegan a esa nación caribeña, la mayor parte de ellos cubanos, y que había sido denunciado por varias organizaciones del exilio en Miami
La máxima presión sobre las autoridades bahamenses se produjo, no obstante, con la huelga de hambre que iniciaron dos activistas cubanos, un ayuno al que pusieron fin este lunes.
Los dos cubanos exigían de las autoridades bahamenses la investigación de los hechos y el castigo a los funcionarios responsables del maltrato infligido a los detenidos.
Uno de los activistas que estuvo en huelga de hambre es Alexis Gómez, quien grabó con un teléfono inteligente las imágenes difundidas en meses pasados por internet en las que se aprecia a un funcionario de un centro de detención de Bahamas "dando patadas a los detenidos".
El final de las movilizaciones del exilio y la huelga de hambre de los dos activistas, el anuncio de Panamá de acoger a los refugiados cubanos detenidos en Bahamas y el propio compromiso de las autoridades bahamenses de acabar con los malos tratos a los indocumentados auguraban un final feliz que no se cumplió.
De hecho, este miércoles, el congresista cubano-estadounidense por Florida Mario Díaz-Balart había agradecido al Gobierno panameño su diligencia en conceder asilo a estos 19 cubanos indocumentados que se encontraban detenidos en Bahamas, territorio de paso para muchos indocumentados hacia Estados Unidos.
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