Generalitat confía controlar hoy dos de los tres incendios que siguen activos

La Pobla de Segur (Lleida), 9 mar.- El conseller de Interior, Felip Puig, confía en que los Bomberos puedan controlar hoy dos de los tres incendios que siguen activos en el Pirineo de Lleida, aprovechando que los medios aéreos se han sumado a las tareas de extinción al mermar las rachas de viento.

De los cuatro incendios que se declararon ayer al mediodía en el Pirineo leridano, sólo uno, el de Coll de Nargó, está en fase de control desde ayer por la tarde, mientras que los otros tres, el de Baix Pallars, el de El Pont de Suert y el de Valls de Valira, continúan activos.

No obstante, las perspectivas de cara a la jornada de hoy son más optimistas, ya que las fuertes rachas de viento han remitido, lo que ha permitido que se incorporen a las labores de extinción once avionetas y helicópteros.

En una rueda de prensa desde el Centro de Comandancia Avanzada, que se ha instalado en La Pobla de Segur, el conseller Puig ha señalado que la posibilidad de luchar contra las llamas desde el aire previsiblemente permitirá controlar al menos dos de los tres incendios que siguen quemando en estos momentos sin control.

"La previsión es que si no cambian las cosas, si no todos, dos de los tres incendios queden bajo control y podamos destinar todos los esfuerzos a apagar el de Gerri de la Sal, que es el de mayor extensión y afectación", ha manifestado Puig.

El conseller ha advertido, no obstante, que la previsión meteorológica apunta a que el viento volverá a soplar con fuerza a partir de esta noche y sobre todo de mañana, lo que puede complicar nuevamente los trabajos de extinción.

"Por eso, aunque consigamos apagar los incendios entre hoy y mañana tendremos que seguir trabajando y remojando los perímetros", ha remarcado.

Puig ha hecho un especial llamamiento a extremar las precauciones para evitar que se produzcan nuevos incendios, ya que la sequía, la baja humedad, el viento y las heladas, que "han acabado de matar la vegetación y los matojos", constituyen unos factores de alto riesgo en el bosque.

Precisamente, sobre las causas de estos frentes, Puig ha confirmado que una de las principales hipótesis que se barajan es que el viento haya reavivado alguna quema controlada y autorizada que se daba por apagada desde hacía días.

También que las fuertes rachas de viento, que en esta zona del Pirineo han llegado a los 130 kilómetros por hora, hayan afectado alguna línea de alta o media tensión por la caída de algún árbol.

En cualquier caso, Puig ha incidido en que la prioridad ahora es apagar los incendios y que la investigación a fondo de las causas no se realizará hasta que éstos estén controlados y extinguidos.