"Quisiera invitar a una oración especial por Gabón, que está atravesando un momento de grave crisis política. Confío al Señor las víctimas de los desencuentros y sus familiares", ha señalado. "Me asocio con los obispos de este querido país africano para invitar a las partes a rechazar violencia y a tener como objetivo siempre el bien común", ha agregado.
Así ha pedido a los católicos que siempre sean "constructores de paz en el respeto de la legalidad, el diálogo y la fraternidad".
Durante la catequesis, el Papa ha reflexionado sobre la misericordia de Dios y ha señalado que cuando alguien va a confesar sus pecados "hay fiesta en el cielo". "No hay pecado en el que hayamos caído del que con la gracia de Dios no se pueda resurgir", ha indicado. "Nadie es irrecuperable", ha manifestado finalmente.
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