En un comunicado este lunes, la policía ha explicado que la propietaria de un domicilio encontró en una habitación los artefactos, que constataron que eran dos granadas de mortero del calibre 50, dos bombas de aviación incediarias modelo B1E alemanas de 50mm y 50 vainas y cartuchos del calibre 7.62.
Al llegar al lugar, contactaron con la propietaria que había localizado los artefactos, y se los llevaron para destruirlos, y los Mossos han recordado que, si se encuentra alguno, es importante no tocarlo y avisar rápidamente a través del teléfono 112, porque el tiempo puede hacerlos inestables y pueden contener carga explosiva.
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