Ningún sospechoso ha sido detenido hasta el momento por el ataque, ocurrido en el norte de Cisjordania ocupada.
El padre, la madre y el hermano del bebé, gravemente quemados, siguen debatiéndose entre la vida y la muerte.
Para tratar de detener a los autores del incendio, Yaalon ordenó el recurso a las detenciones administrativas, según un portavoz de Defensa.
Esta medida podría dar a los investigadores el tiempo necesario para reunir pruebas suficientes que permitan llevar a los sospechosos ante la justicia, según los medios israelíes.
Este procedimiento heredado del mandato británico en Palestina, y que hasta ahora solo se aplicaba a los palestinos, permite encarcelar sin inculpación ni juicio a sospechosos por periodos de seis meses renovables indefinidamente.
Actualmente, 379 de 5.686 prisioneros palestinos se encuentran sometidos a este régimen penitenciario.
"El terrorismo judío debe ser tratado con los mismos medios que el terrorismo árabe, incluida la utilización de medios interrogatorios apropiados y detenciones administrativas", declaró Yaalon, según el portavoz de Defensa, haciendo alusión aparentemente a lo que las autoridades israelíes denominan "presiones físicas moderadas", un método de interrogatorio validado por la justicia israelí, pero que los palestinos califican de tortura.
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