Jordania apuesta por los coches híbridos

  • El gobierno jordano concede una exención tributaria a los coches híbridos, de forma que acaban costando lo mismo que un vehículo tradicional. Se trata de una medida pionera en Oriente Medio, donde la cultura del cuidado del medio ambiente aún está poco extendida.
La cultura ecologista comienza a fraguar en Amán (Jordania)
La cultura ecologista comienza a fraguar en Amán (Jordania)
Ali Jarekji | Reuters
Tom A. Peter | GlobalPost para lainformacion.com

(Amán, Jordania). Ali Malhas es algo así como un apóstol del coche híbrido. Ya va en su segundo Toyota Prius y estuvo entre los primeros en comprar uno cuando salieron a la venta en 2004. Desde entonces, calcula que ha convencido a entre 10 y 15 personas para que hagan lo mismo.

A veces, sólo para divertirse imagina anuncios publicitarios para Prius.Cuando conduces un Prius, "te conviertes en mejor persona", dice Malhas, un ingeniero informático, que irónicamente no trabaja para Toyota ni ninguna de sus empresas afiliadas.

Ahora que diversos países de Oriente Medio buscan mecanismos para reducir sus emisiones de CO2, los consumidores como Malhas tienen un papel crucial en el mundo árabe. Las reformas medioambientales de los gobiernos de la región han sido lentas y poco efectivas y no han logrado llegar a las bases. En Jordania, la popularidad creciente de los coches híbridos –que aún representan un porcentaje muy pequeño- se ha visto reforzada principalmente por una exención tributaria que deja el Prius al mismo nivel que los coches convencionales.

La población también puede adquirir coches híbridos usados en la zona franca de Jordania, donde no se pagan impuestos. Los coches, sin embargo, vienen sin garantía del fabricante. "Si se comienza con iniciativas pequeñas y se les permite crecer, creo que funcionará mejor que una norma que venga desde la alta jerarquía. Lo que se quiere es animar a la gente, no imponerles nada", afirma Mishkat al-Moumin, experto del Middle East Institute y especialista en temas medioambientales en la región.

Iniciativas como la exención tributaria permiten a los consumidores apreciar de primera mano las ventajas de una opción más comprometida con el medio ambiente, según Moumin. Así la gente compra mucho más convencida de su elección que si fuera algo impuesto por el gobierno.

"En esta región y en particular en Jordania, somos más bien reactivos que proactivos. Dependemos mucho de los comentarios y las recomendaciones de la gente", explica Malhas.

Pese a que los temas medioambientales siguen siendo un concepto bastante desconocido para muchos árabes, cada vez se hace más necesario tomar medidas. Jordania es el cuarto país del mundo con menos reservas de agua per cápita y el cambio climático amenaza con reducir aún más los niveles de los acuíferos y perjudicar la producción agrícola.

Este país, al igual que otros de su entorno, ha pedido a las naciones industrializadas que reduzcan sus emisiones en un 40 por ciento en los próximos 10 años y un 80 por ciento de aquí al 2050. También han solicitado ayuda para preparar la región para el cambio climático. En este sentido, la Unión Europea se comprometió en diciembre a destinar 7.200 millones de euros a ayudar a los países en vías de desarrollo en su lucha contra el cambio climático en el periodo 2010-2012.

Si bien las emisiones de CO2 de Oriente Medio son relativamente pequeñas comparadas con los países desarrollados (en 2007 Jordania produjo unos 19 millones de toneladas métricas de carbono mientras que el estado de Rhode Island, en EEUU, registró 11 millones), también están tomando medidas para reducirlas aún más. Por ejemplo, en 2020 Jordania se ha comprometido a producir el 10 por ciento de su energía con energías renovables. "Implantaremos todas las recomendaciones y acuerdos consensuados internacionalmente", declaraba el rey Abdulá en un discurso leído por el príncipe Hamzah en la Cumbre del Clima de Copenhague.

"Hay una mayor conciencia de la población sobre las energías limpias y las tecnologías ecológicas", explica Suhil Kiwan, director del centro de energía de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Jordania. Kiwan sostiene que la tecnología verde ha ido ganando fuerza entre los académicos y los líderes del sector. Por ejemplo, en 2009 hubo al menos seis o siete conferencias sobre tecnologías limpias. Hace sólo un año se realizaban una o dos.

Sin embargo, la mayoría de los jordanos no se puede permitir un coche híbrido, pese a la exención tributaria. Un Prius nuevo cuesta 38.000 dólares (unos 26.500 euros). Aún así, el concesionario Central Trade and Auto Company, representante de Toyota en Amán, tiene una lista de espera de un mes para comprar uno de los cinco o seis Prius que recibe mensualmente, indica Dalia el-Far, responsable de marketing.

Pese a la demanda actual, Far señala que si el gobierno retirara el incentivo fiscal, el coche subiría a casi 50.000 dólares y muchos clientes probablemente buscarían algo más económico. "Volveríamos al mismo público [de antes de la exención]. La gente que sabe de tecnología y aquellos preocupados por el medio ambiente, básicamente familias con dinero", añade Far. Actualmente, la exención tributaria no tiene fecha límite ni ha habido ninguna información oficial sobre cuándo acabará.

*(Este texto ha sido editado por Lainformacion.com para adaptarlo al público español).

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