La búsqueda del talento desde el "cole"

Pilar Palazuelos.

Santander, 27 ene.- Cantabria se propone no dejar escapar el talento de sus aulas y, por eso, ha iniciado un programa pionero para detectar excelencia deportiva en niños de sexto de Primaria y prevé impulsar una iniciativa similar en música, con el fin de canalizar habilidades y ayudar a los jóvenes a conocer sus límites.

De momento, el programa para descubrir talento deportivo se realiza con medio millar de alumnos en veinte colegios de Santander, diez públicos y diez concertados.

Y el próximo reto, que está en sus trámites iniciales, es poner en marcha un planteamiento similar para identificar a los chicos con una especial habilidad en la música e incentivar esa capacidad desde la clase.

Una meta más ambiciosa sería poder realizar el programa deportivo no sólo con niños de once años, sino también de catorce, una edad en la que ya se puede vislumbrar el desarrollo físico del individuo.

El director general de Deporte de Cantabria, Javier Soler, uno de los "padres" del proyecto junto a Ramón Torralbo, profesor en la facultad de Educación de la Universidad de Cantabria, conocido por ser el entrenador de la atleta Ruth Beitia, asegura en una entrevista con Efe que Cantabria recogerá los frutos "en quince o veinte años".

A parte de las pruebas físicas en cinco ámbitos, salto, velocidad, resistencia, elasticidad y fuerza, se mide y se pesa a los alumnos, y se evalúa su Índice de Masa Corporal.

Además, se les pasa un test con 24 cuestiones sobre hábitos de alimentación, ocio y descanso, de forma que, por ejemplo, a los niños se les pregunta por el desayuno que toman antes de ir a clase, su tiempo de descanso y a qué hora se levantan, o cómo se desplazan habitualmente al centro educativo.

"En la gran masa puedes encontrar una Ruth Beitia de cada mil estudiantes, pero lo importante es, en esos 999, que no son como ella, saber qué capacidades tienen y si son buenos para rugby, hockey, balonmano o lo que sea", explica el director de Deporte.

Y ahí está el quid de la cuestión: en aprovechar capacidades que, de no ser detectadas, pasarían desapercibidas, y que "la sociedad perdería".

Como ejemplo, un caso que ya se ha dado en Cantabria: cuando se preguntó qué deporte practica a uno de los "dos o tres" chicos con mejores resultados recabados hasta el momento, la respuesta fue que ninguno.

"Dijo que sólo se dedica a tocar el violín y que no tiene deporte como actividad extraescolar", narra Torralbo, que precisa que los primeros datos que se van conociendo revelan que "hay un nivel bastante alto".

Este programa ha empezado a llevarse a cabo a mediados de noviembre, y este mes de enero concluye su primera fase, en la que se realizan los test de capacidad física y de hábitos saludables.

El siguiente nivel es poner esos datos -que recogen y procesan dos personas- a disposición de las federaciones, escuelas y clubes deportivos más cercanos a cada centro, para que valoren si les interesa dirigirse a los alumnos en los que haya podido descubrirse una cualidad especial.

Soler añade que cuando ha presentado el proyecto a sus homólogos de otras comunidades autónomas hay un gran interés, por lo que el Gobierno de Cantabria no descarta que su idea se reproduzca en otros lugares.