Madrid, 30 may.- Se estima que la ley antitabaco, que prohíbe fumar en todos los espacios públicos cerrados, salva cada año mil vidas de fumadores pasivos, aunque aun no se ha realizado ningún estudio que relacione esta normativa con la incidencia de infarto de miocardio.
Así lo ha asegurado hoy la Fundación Española del Corazón (FEC) en un comunicado, con motivo de la conmemoración mañana del Día Mundial Sin Tabaco.
Esta sociedad científica ha destacado que, según diversos estudios, las leyes europeas que regulan el consumo de tabaco han logrado reducir entre un 10 y un 20 por ciento la incidencia del infarto de miocardio en Europa.
Así, una reciente investigación realizada en Alemania, que ha incluido a cuatro millones de personas, ha demostrado que tras el primer año de aplicación de la normativa antitabaco en este país se han reducido en un 13 % los ingresos por angina de pecho y en casi un 9 % los debidos a infarto.
El estudio, además, ha constatado un ahorro de entre el 9,6 % y el 20,1 % en el coste por ingresos hospitalarios por ambos motivos, respectivamente.
Otro análisis, en este caso escocés, ha mostrado una reducción de los infartos del 17 %, especialmente en jóvenes y no fumadores.
La FEC recuerda que el tabaquismo, directo o indirecto, es el factor de riesgo cardiovascular más importante, ya que triplica las probabilidades de padecer un infarto.
Entre el 20 y el 25 % de la enfermedad cardiovascular es atribuible al tabaco.
Según datos del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, el consumo de tabaco provoca cerca de 50.000 muertes anuales.
En España mueren 6.200 fumadores pasivos cada año, de los cuales 5.000 fallecen por aspirar el humo en su propio hogar.
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