La pérdida de la posidonia supera la de los bosques tropicales

  • Las praderas de posidonia oceánica en el Mediterráneo, uno de los ecosistemas más productivos del planeta e influyente en el bienestar del hombre, mantienen una tasa de pérdida anual del 5%, cifra superior a la tasa de pérdida de los bosques tropicales.

Madrid, 27 sep.- Las praderas de posidonia oceánica en el Mediterráneo, uno de los ecosistemas más productivos del planeta e influyente en el bienestar del hombre, mantienen una tasa de pérdida anual del 5%, cifra superior a la tasa de pérdida de los bosques tropicales.

El lento crecimiento (2cm/año) y la escasa producción de semillas hacen que la pérdida sea irreversible, ya que la recuperación de una pradera de posidonia requiere varios años, según un informe publicado por el Ministerio de Medio Ambiente y la Fundación Biodiversidad sobre la Evaluación de los Ecosistemas del Milenio de España.

La posidonia, fundamental en la regulación sedimentaria del Mediterráneo, filtra partículas, alimenta las playas y protege la costa reduciendo la energía de las olas en su camino a la costa.

Asimismo, las praderas desempeñan una importante función en la regulación climática, ya que son el sumidero de CO2 más importante de todo el mar Mediterráneo, almacenando casi medio millón de toneladas de carbono al año.

El informe de evaluación añade que las posidonias pueden producir anualmente pesca, materia orgánica, protección de costas y otros servicios por valor de 14.500 euros por hectárea y año, además de ser protagonistas claves en garantizar la biodiversidad y oxigenación de los fondos marinos.

Por otro lado, los elementos que más daño provocan en las praderas marinas vienen determinado por un uso abusivo de contaminantes en las aguas, pesca destructiva, fondeo incontrolado de embarcaciones, acuicultura intensiva y especies invasoras.

La Evaluación de los Ecosistemas del Milenio, convocada en el año 2000 por la ONU, responde a una auditoría con base científica sobre el estado de conservación de los ecosistemas y la biodiversidad del planeta.

El estudio de evaluación asienta las bases de una generación de políticas ambientales y da cumplimiento a acuerdos estatales e internacionales, y ha sido legitimado y preparado por 1.360 expertos de 95 países, y controlado por un Consejo Editorial independiente de 80 personas.

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