La secularización es una oportunidad para evangelizar de nuevo, dicen obispos

  • Los cristianos no deben ser pesimistas y tienen que ver la globalización, la secularización y los nuevos escenarios de la sociedad, como las migraciones, como oportunidades para presentar el Evangelio, "que no es un producto de mercado y hay que llevarlo por el mundo con valentía".

Ciudad del Vaticano, 26 oct.- Los cristianos no deben ser pesimistas y tienen que ver la globalización, la secularización y los nuevos escenarios de la sociedad, como las migraciones, como oportunidades para presentar el Evangelio, "que no es un producto de mercado y hay que llevarlo por el mundo con valentía".

Así se señala en el Mensaje Final a los fieles del Sínodo de Obispos para la Nueva Evangelización, que fue aprobado hoy por los 262 prelados que desde el 7 de octubre y hasta el domingo 28 están reunidos en el Vaticano para tratar sobre la nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana.

Los prelados, conscientes de que el mal "no tendrá la última palabra", invitan a los cristianos a vencer el miedo con la fe y a mirar el mundo con serena valentía.

"Por tanto, nada de pesimismos, la globalización, la secularización y los nuevos escenarios de la sociedad, como las migraciones, incluso con las dificultades y sufrimientos que conllevan, deben ser oportunidades de evangelización", afirman.

Los obispos consideran a la familia como "lugar natural" para la nueva evangelización e insisten en que debe ser sostenida por la Iglesia, la política y la sociedad. Dentro de la familia resaltan el papel de la mujer.

También señalan que hay parejas que conviven sin el vínculo sacramental y que se extienden "situaciones familiares irregulares construidas sobre el fracaso de matrimonios anteriores".

"A todos ellos les queremos decir que el amor de Dios no abandona a nadie, que la Iglesia los ama y es una casa acogedora con todos, que siguen siendo miembros de la Iglesia, aunque no pueden recibir la absolución sacramental ni la eucaristía.

Que las comunidades católica estén abiertas a acompañar a cuantos viven estas situaciones y favorezcan caminos de conversión y de reconciliación.

También consideran a las parroquias como centros de evangelización, recuerdan la importancia de la formación permanente de los laicos para evangelizar y abogan por la colaboración con otras Iglesias y comunidades eclesiales para anunciar el Evangelio.

El Sínodo subraya que el diálogo interreligioso contribuye a la paz, rechaza el integrismo y denuncia la violencia contra los cristianos.

El Mensaje tiene en cuenta los diferentes continentes y las necesidades de cada uno de evangelización.

De Europa señala que está marcada por una secularización agresiva, pero agrega que las dificultades de presente no deben abatir a los cristianos europeos, sino que debe ser percibido como un reto.

A América Latina la invita a vivir la misión permanente para afrontar los desafíos como la pobreza, la violencia y también las nuevas condiciones del pluralismo religioso.

Además del mensaje, los prelados también aprobarán las propuestas con las que el Papa Benedicto XVI preparará la "Exhortación Apostólica", el documento con el que oficialmente se cierra un Sínodo y que se hace público varios meses después de la reunión.

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