Las bandas de grafiteros, un "riesgo" para los viajeros de Metro y Cercanías

  • Suelen ser bandas de jóvenes organizadas que pintan grafitis en los trenes, huyen y publican el vídeo que han grabado en Internet, una actuación habitual, según aseguran fuentes de Metro y Renfe Cercanías, que advierten del "riesgo" que supone para los viajeros este tipo de comportamientos cuando lo hacen con los pasajeros dentro del vagón.

Sol Carreras

Madrid, 14 jul.- Suelen ser bandas de jóvenes organizadas que pintan grafitis en los trenes, huyen y publican el vídeo que han grabado en Internet, una actuación habitual, según aseguran fuentes de Metro y Renfe Cercanías, que advierten del "riesgo" que supone para los viajeros este tipo de comportamientos cuando lo hacen con los pasajeros dentro del vagón.

Firma como "Kirax" y es el líder de la banda de grafiteros "Original Writers" al que la Policía Nacional le imputa la autoría de 54 grafitis en trenes e instalaciones ferroviarias que han causado daños que ascienden a 269.534 euros.

Lo detuvieron el pasado 11 de julio junto a un compañero cuando las cámaras de seguridad de Renfe les sorprendieron rompiendo con un martillo de emergencias 24 cristales de un tren en la estación de Valdemoro (Madrid).

Aunque fuentes policiales han informado de que no tienen estadísticas sobre este tipo de actuaciones, desde Metro y Renfe han asegurado a Efe que pintar grafitis en los vagones, en ocasiones con los pasajeros dentro, es algo que ocurre "desde hace tiempo".

"No es una novedad ni hemos visto un repunte", comentan desde Metro, y añaden que gracias a su protocolo de seguridad logran frustrar seis de cada siete intentos.

Los grafiteros, chicos y chicas jóvenes que actúan en grupo, a veces a cara descubierta, pintan los trenes en las cocheras, en los túneles o en las propias estaciones, donde activan el freno de emergencia para parar la circulación y evitar que el tren pueda arrancar de nuevo.

Cuando esto ocurre, el conductor del convoy se pone en contacto con el puesto de mando, que a su vez avisa al personal de seguridad de la estación y a la Policía Nacional, cuyos agentes son los únicos que están legitimados para detener a los infractores.

Las actuaciones de los grafiteros pueden acarrear una pena de prisión de entre seis meses y tres años, en función de cómo haya transcurrido los hechos, ya que a veces sólo se producen pintadas y en otras ocasiones hay alguna agresión de por medio.

De hecho, desde Renfe advierten de que cuando se activa el freno de emergencia no sólo se producen "retrasos y molestias innecesarias", como transbordos o llegar la destino con retraso, sino que se pueden ocasionar "riesgos físicos y psíquicos" a los viajeros que presencian estas actuaciones.

En la red de ferrocarriles señalan que se ven afectados fundamentalmente los trenes de Cercanías, pero también algún AVE, aunque ya en 2010 notaron cómo gracias a un plan preventivo antigrafitis se "estabilizó" el número de pintadas y se "redujeron" los metros cuadrados afectados.

Algunos grafiteros publican en Internet los vídeos de sus actuaciones, que llegan a calificar de "arte urbano" y en las que incluso indican el día y el lugar en que realizaron las pintadas, además de su apodo.

Un testigo de una de estas pintadas, que tuvo lugar el pasado 6 de junio en la estación de Cercanías de Ramón y Cajal, ha relatado a Efe que nueve jóvenes llegaron al andén y cuatro se pusieron a pintar "tranquilamente" un vagón mientras uno de ellos grababa la escena con una cámara de vídeo y el resto con móviles, a pesar de que sólo uno de los integrantes del grupo iba encapuchado.

"Se empezaron a oír gritos, un hombre mayor se puso muy nervioso, les insultó y les dijo que estaba estropeando un bien público", cuenta.

El conductor del tren se bajó del convoy y recriminó su actuación a los jóvenes, que le respondieron lanzándole gravilla de la vía y huyeron por un terraplén hasta el mismo puente del que habían descendido.

Al contratiempo que estos actos produce en los viajeros hay que sumar el perjuicio económico, ya que según Metro la limpieza de los vagones afectados en Madrid puede suponer alrededor del millón de euros al año, una cantidad muy parecida a la que calcula Renfe, que indica que la media diaria en toda España supera los de 26.000 euros.

Recientemente el portavoz de Gobierno de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, ha pedido la "máxima" contundencia "policial y judicial" para combatir unos delitos que a su juicio ponen en "grave riesgo la integridad de los pasajeros"

Por su parte, el consejero de Transportes, Pablo Cavero, ha declarado que los grafitis en la red de metro de Madrid son "actos delictivos muy serios" y ha mostrado su confianza en las investigaciones de la Policía Nacional para averiguar quiénes son los responsables.

Mostrar comentarios