Libia teme un "empeoramiento" de la inmigración ilegal a Europa

Roma, 12 may.- El ministro de Asuntos Exteriores de Libia, Achur Bin Jeyal, expresó hoy el temor de su Gobierno de que se produzca un "empeoramiento" del fenómeno de la inmigración irregular desde el norte de África hacia Europa, por lo que pidió a Italia que analice el tema con la Unión Europea (UE).

En una comparecencia de prensa en Roma al término de un encuentro con su homólogo italiano Giulio Terzi, Bin Jeyal precisó que, por el momento, la situación "no es tan grave", pero que a medio plazo hay indicios de que puede aumentar el flujo de inmigrantes indocumentados.

"Tememos un empeoramiento en el ámbito de la inmigración ilegal. Por eso queremos lanzar una señal, una advertencia, a Italia para que afronte con la Unión Europea este tema", dijo el ministro de Exteriores de Libia.

"La situación ahora no es tan grave, pero los indicadores muestran que las cosas podrían cambiar a peor. En la frontera de Egipto y Libia han llegado distintos flujos de inmigrantes africanos y aunque ahora no son un número grande, podría haber un aumento", agregó.

Este posible recrudecimiento, según Bin Jeyal, puede traer consecuencias para la Unión Europea por lo que transmitió a su colega italiano la disposición de su Gobierno de colaborar con las autoridades comunitarias para abordarlo y tratar de prevenirlo.

En este sentido, Terzi pidió a Bruselas en la misma comparecencia un "plan urgente" sobre el fenómeno de la inmigración irregular, algo que planteará en el Consejo Europeo de Asuntos Exteriores del próximo lunes en la capital comunitaria.

"El de la inmigración es un tema a afrontar con un plan europeo, que financie los instrumentos de los que ya dispone la Unión Europea", afirmó el ministro de Exteriores de Italia.

Terzi recordó que Italia y Libia ya colaboran para luchar contra la inmigración irregular en base a su Tratado de Amistad, reactivado el pasado diciembre después de que el conflicto internó en el país norteafricano, que terminó con la caída de Muamar el Gadafi, hubiera obligado a suspender su aplicación unos meses.