Roma.- Entre 300 y 400 inmigrantes procedentes del norte de África llegaron hoy a la isla italiana de Lampedusa, donde vuelven a arribar indocumentados de forma masiva después de que durante el fin de semana no se hubieran tenido noticias de desembarcos, informaron a Efe fuentes de la Capitanía de Puerto.
Una barcaza con 71 indocumentados, que aseguraron ser tunecinos y entre los que no se encontraban ni mujeres ni niños, llegó en torno al mediodía de este lunes a Lampedusa, después de que una lancha de la Guardia de Finanzas la escoltara tras avistarla a varias millas al sur de la isla italiana.
Poco después, otra barcaza con más de un centenar de personas a bordo tuvo que ser asistida por la Guardia Costera cuando se encontraba a unas 30 millas de la playa para evitar que se hundiera.
Las mismas fuentes indicaron que una tercera embarcación fue conducida a tierra durante la tarde de hoy aunque no precisaron cuántos inmigrantes viajaban en su interior.
Según informan los medios de comunicación italianos, en las últimas horas las autoridades de Lampedusa han avistado otras 22 barcazas, en las que se cree que podrían viajar unos mil indocumentados y que se espera que lleguen a la isla en las próximas horas.
Siete personas tuvieron que ser asistidas por los servicios sanitarios de la isla por deshidratación e hipotermia.
En el centro de primera acogida de la isla se encuentran en estos momentos unas 1.350 personas, una cifra que podría aumentar en las próximas horas si se producen más desembarcos, informan los medios locales.
En la isla italiana se reunió hoy la presidenta del partido ultraderechista francés Frente Nacional (FN), Marine Le Pen, con el alcalde de Lampedusa, Bernardino de Rubeis, para abordar la llegada masiva de indocumentados desde el norte de África, sobre todo desde Túnez.
La hija del histórico líder, Jean-Marie Le Pen, dijo que en lugar de acoger a los inmigrantes en la isla de Lampedusa, Italia debería enviar naves con agua y comida para alimentarlos en el mar y evitar así su desembarco en las costas italianas.
A Le Pen le acompañó durante su visita el político italiano Mario Borghezio, miembro del partido federalista y conservador Liga Norte (LN), socio de Gobierno de Silvio Berlusconi, una presencia que motivó las protestas hoy de un grupo de jóvenes en Lampedusa.
"Estamos lejos del modo de ver las cosas de Borghezio y Le Pen. A la vez, no queremos vernos implicados en inútiles polémicas políticas de personajes que pretenden darse publicidad o propaganda de partido a nuestra costa", rezaba el manifiesto del Comité de Jóvenes de Lampedusa, organizador de las protestas de hoy.
"Lampedusa es tierra de acogida y solidaridad. Repudiamos el racismo y la xenofobia en todas sus formas y expresiones", proseguía.
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