Madrid. Defensores de los animales se encierran en las jaulas de la perrera de parla

Decenas de voluntarios de la ONG La Voz Animal iniciaron este lunes un encierro en las jaulas del Centro de Protección Animal de Parla (Madrid) en protesta por la decisión de conceder la gestión de los animales abandonados del municipio a una empresa dedicada fundamentalmente a la desratización.
Los voluntarios y activistas de defensa de los derechos de los animales continuaban encerrados en estas instalaciones a las 14.00 horas de este martes, según informó La Voz Animal, que ha colaborado en la adopción de los perros y gatos abandonados de Parla en los últimos 14 años.
Señaló que el Ayuntamiento de Parla, gobernado por el PSOE, comunicó verbalmente el pasado viernes a Beatriz Menchén, vicepresidenta de La Voz Animal, que debía abandonar su trabajo este lunes, ya que había contratado a “una empresa de desratización y control de plagas que se encargará de la recogida de los perros y gatos abandonados del municipio y la gestión del Centro de Protección Animal”.
Menchén criticó que el Ayuntamiento de Parla haya decidido “darle la gestión del Centro de Protección Animal a una empresa desratizadora, considerando a los perros y gatos como una plaga a exterminar”. “Los pliegos del contrato exigido por el Ayuntamiento de Parla impedían que ninguna entidad de protección animal pudiera acceder a optar por la contratación y sólo fuera posible que participen empresas de desratización y control de plagas”, aseguró.
Ante esta situación, voluntarios de La Voz Animal se presentaron en la perrera a primera hora de este lunes para evitar el desalojo y evitaron que un equipo de cerrajeros cambiara la cerradura de las instalaciones. Una veintena de ellos decidieron iniciar un encierro en las jaulas del Centro de Protección Animal de Parla hasta que el alcalde de Parla, José María Fraile, “se comprometa públicamente a respetar el cumplimiento de los trámites legales, ya que el nuevo contrato se ha firmado sin haber finalizado el contrato actual”.
Por otro lado, fuentes del consistorio parleño indicaron a Servimedia que el ayuntamiento “ha buscado que sea una única empresa la que pueda prestar varios servicios, estando capacitada y especializada en todos”, tanto el control de plagas como la protección de animales abandonados.
“Desde el Ayuntamiento desmentimos rotundamente que se vaya a practicar la eutanasia a los animales que serán acogidos ahora en el Centro de Protección animal de la ciudad. La ley impide sacrificar animales si no es por una causa mayor -como una enfermedad que suponga sufrimiento extremo para el animal- y siempre debe contar con la autorización de un veterinario que certificará que esa desagradable posibilidad es la única”, concluyeron.