Markandya asegura que la lucha contra el cambio climático no tiene por qué salir cara


El director científico del Basque Centre for Climate Change (BC3), Anil Markandya dijo hoy en el ‘Fórum Europa. Tribuna Euskadi’ que es “indispensable pasar a la acción” ante el cambio climático y que “no podemos ignorar las amenazas que plantea” este fenómeno.
Markandya afirmó, a este respecto, que “existe un amplio abanico de actuaciones factibles de adaptación y cuyos costes no siempre son demasiado altos, pudiendo ser muy efectivos”. En este sentido, el científico aseguró que estas políticas y medidas adecuadas necesitan de un “compromiso colectivo de todos los agentes de la sociedad para participar y contribuir en el diseño de la elección óptima de los planes y su posterior implementación”.
Durante la presentación de la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco, Ana Isabel Oregi, en el citado encuentro informativo, organizado por Nueva Economía Fórum, Markandya recordó que el itinerario marcado por el informe del New Climate Economy sobre cambio climático hacia el desarrollo sostenible demanda nuevas inversiones en infraestructuras. Alrededor de 90 billones de dólares en los próximos 15 años para mejorar la urbanización y mejorar la productividad agrícola que satisfaga las necesidades energéticas para una economía mundial creciente.
Además recordó que este informe dice que esta inversión puede estar acompañada por instrumentos de política adecuados, como la reducción de subvenciones destinadas a consumibles de carburantes fósiles, el establecimiento de un precio para el carbono, financiación para las inversiones bajas en carbono, y diseño de modelos de ciudades “compactas”. Si esto es así, limitaría al menos el incremento de la temperatura global provocada por el carbono a dos grados, y no supondría sobrecoste alguno.
En este sentido, el director científico del BC3 señaló que “las políticas de cambio climático ofrecen “verdaderas oportunidades que no necesariamente implican costes añadidos”. Asimismo puso como ejemplo la trasformación de la capital vizcaína, que “se ha reinventado a sí misma” tras un periodo de declive industrial sin que haya implicado un fuerte proceso de expansión de área ocupada mediante la reutilización de espacios destinados a nuevos usos y manteniendo una estructura “compacta” de ciudad.

Mostrar comentarios