Más de 380 personas fallecen en Brasil por lluvias y aludes

  • Las lluvias equivalentes a un mes en solo 24 horas se han llevado por delante la vida de al menos 381 personas, aunque la cifra no para de aumentar a medida que pasan las horas. Barrios enteros han quedado enterrados bajo el lodo en una situación que las autoridades han reconocido como crítica.
Un mar de barro ahoga el suroeste de Brasil
Un mar de barro ahoga el suroeste de Brasil
Agencias
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Deslizamientos de tierra e inundaciones han devastado en las últimas horas las localidades de un área montañosa cerca de Río de Janeiro, causando la muerte de al menos 368 personas cuando el torrente de barro y agua arrasó la región brasileña enterrando a muchas familias mientras dormían.

Otras 13 personas murieron el martes en el estado de Sao Paulo por las intensas lluvias, lo que elevó la cifra total de fallecidos en el sur del país a al menos 270.

Laderas de colinas y riberas de ríos en la pintoresca región de Serrana cedieron ante el equivalente a un mes de lluvias en sólo 24 horas, causando la muerte de muchas personas a primera hora del miércoles y la destrucción de decenas de viviendas, dijeron responsables de emergencias.

Imágenes de televisión mostraron muchas viviendas enterradas en el barro, mientras residentes desesperados y socorristas buscaban supervivientes.

"No hay manera de saber qué vivienda se derrumbará. Ricos y pobres, todo fue destruido", dijo Fernanda Carvalho, una empleada doméstica, citada en la página de Internet del canal Globo.

Nova Friburgo se ha llevado la peor parte, con 168 fallecidos. Aunque en Teresópolis el número de fallecidos podría ser mayor. Allí se han contabilizado 161 muertos, de momento. Además, en Petrópolis han muerto al menos 39 personas.

Se espera que la cifra de víctimas aumente cuando los equipos de emergencia lleguen a las zonas remotas.

"Creo que el número de muertos es mucho más del anunciado hasta ahora", dijo el secretario de Medio Ambiente del estado Carlos Minc, citado por Globo después de sobrevolar la región. "Muchas personas murieron mientras dormían", subrayó.

Miles de aislados

La nueva presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, firmó un decreto que dispone 780 millones de reales (unos 351 millones de euros) para la reconstrucción de las áreas afectadas y tiene previsto sobrevolar hoy la región.

Miles de personas en la zona están aisladas por las inundaciones y no tienen electricidad ni línea telefónica.

Las precipitaciones causaron que al menos un río se desbordara, sumergiendo automóviles y destruyendo casas en Teresópolis, mostraron imágenes de televisión.

"Es la mayor catástrofe en la historia de Teresópolis", fundada en 1891, declaró el secretario del Ambiente del estado de Río de Janeiro, Carlos Minc, una afirmación en la que coincidió el alcalde de esa localidad, Jorge Mário Sedlacek, quien apuntó que el rescate deberá continuar durante algunos días.

"Vi seis cuerpos en mi calle", dijo a Reuters por teléfono Antonio Venancio, un residente de Teresópolis de 53 años, cuya casa se inundó con barro pero se mantuvo en pie. "Simplemente no sabemos qué hacer ante algo tan horrible", agregó.

El gobernador del estado de Río de Janeiro, Sergio Cabral, dijo en un comunicado que solicitó a la Armada aviones para llevar equipos de socorro y equipamiento a la región, que quedó parcialmente aislada de Río de Janeiro por carretera.

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