El pasado 3 de enero, el grupo armado islamista Boko Haram lanzó un ataque masivo en la localidad de baga, cercana al lago Tchad en el Estado de Borno, al norte de Nigeria.
La ofensiva del grupo militar, las más mortífera de los últimos cinco años, ha provocado miles de muertos y desplazados que han huído a la ciudad Maiguguri, donde Médicos Sin Fronteras (MSF) les está proporcionando asistencia médica, según se informa en un comunicado.
Así, tras el ataque, miles de supervivientes han sido reagrupados en el campo denominado 'Pueblo Maestro'. Una veintena de heridos fueron atendidos en el hospital de la localidad por el propio equipo del Ministerio de Salud del país.
Otros habitantes de la zona de Baga huyeron para refugiarse en la zona periférica del Lago Tchad. Los equipos de MSF han llevado a cabo una primera evaluación de las necesidades más urgentes, fundamentalmente sobre la situación nutricional y las necesidades médicas de la población desplazada, la cual representa a un total de 5.000 personas.
"Hemos donado alimentos, medicamentos y material médico a los centros de salud del campo", los cuales presentan "grandes carencias en sus provisiones". Al igual que "ya hacemos en otros campos de desplazados, vamos a comenzar a dar soporte al personal de las estructuras sanitarias ya existentes, apoyándolos en materia de desnutrición infantil, en atención primaria y en las consultas prenatales y ginecológicas, atendiendo a los partos de las numerosas mujeres embarazadas", han informado.
"Vamos a seguir muy de cerca la evolución de los desplazados así como de la situación en el campo". MSF se irá adaptando en función de cómo se desarrollen los hechos, tal y como explica Isabelle Mouniaman-Mara, responsable de programas de MSF en Nigeria.Muchos supervivientes de la masacre pueden estar escondidos en los montes
Se cree que muchos supervivientes estén aún escondidos en los montes de los alrededores de Baga. Las autoridades han enviado vehículos de transporte para trasladarlos a la localidad de Maiduguri.
"Dada la situación en la zona, MSF no podrá desplazarse a Baga para hacer una evaluación de las necesidades médicas y humanitarias de la población. Por ello, vamos a seguir interviniendo sobre la población desplazada a Maiduguri", puntualiza Mouniaman-Nara.
Allí, la situación es también "tensa", tras un atentado bomba en el mercado de la localidad el pasado 10 de enero, que causó la muerte a veinte personas.Solo hay dos médicos en Borno, donde hay medio millón de desplazados
Desde el año 2004, MSF trabaja en Nigeria y, desde 2014, de forma permanente en Maiduguri, localidad principal del Estado de Borno. En abril de 2013, MSF intervino en Baga donde se habían producido importantes enfrentamientos. Los equipos de la organización trabajaron durante cuatro semanas en la ciudad y realizaron donaciones de medicamentos y material médico. Dado el aumento de la inseguridad en la zona, MSF se vio obligada a evacuar sus equipos de la zona.
Desde mayo de 2013 hasta noviembre de 2014, tres estados del nordeste de Nigeria fueron declarados en estado de emergencia por el Gobierno del país en un intento de combatir la violencia provocada por Boko Haram.
De ahí que Isabelle Mouniaman-Nara explique cuál es la situación que se vive en el nordeste del país y, en particular, en el estado de Borno: "En los últimos cuatro años, la situación ha empeorado en la zona; la radicalización de Boko Haram y su cambio de estrategia, tomando el control de pueblos y aldeas, con secuestros en masa y mediante el intento del establecimiento de un califato, tiene como consecuencias el desplazamiento de más población, más problemas de salud -epidemias- y más problemas en el acceso a los cuidados médicos en la zona".
En la actualidad, comenta, hay "entre 800.000 y 1,5 millones de desplazados en Nigeria y la gran mayoría provienen de esta zona". Y es que, Maiduguri sufrió el pasado año cinco ataques terroristas con explosivos, que dejaron tras de sí "muchos muertos y heridos".
"Boko Haram ha atacado Maiduguri en dos ocasiones y todas las carreteras que llevan a la ciudad, excepto una, fueron cerradas; estas restricciones -incluidas las de los movimientos de población- perjudican al comercio y afectan a la economía local". De ahí que desde MSF se espere que haya "más ataques"."Las elecciones presidenciales de febrero seguramente provocarán mayor tensión y violencia", ha destacado.
MSF tuvo que abandonar Borno en mayo de 2013 debido a la "inseguridad". Sin embargo, en agosto del año pasado volvió a Maiduguri de forma más permanente; "hay enormes carencias en la provisión de salud a la población de la ciudad, tanto habitantes como desplazados, y en Borno en general, donde sólo hay dos médicos en toda la zona norte del Estado".
En lo referente a la actividad de MSF en la zona y los planes de organización de cara al futuro, la coordinadora destaca que desde septiembre a diciembre se atendió a los afectados por una epidemia de cólera. En total, 6.833 pacientes."El 40% de los mismos vive en campos de desplazados". "Diferentes estimaciones sitúan en medio millón el número de personas desplazadas en Maiduguri", ha relatado. 400.000 de ellos en la ciudad, el 90% de los cuales viven con la comunidad y el 10% restante en diferentes campos que se han ido erigiendo desde el mes de julio. "La gente que se ha instalado en estos campos son en su mayoría habitantes de los pueblos de la zona, que tuvieron que huir tras los ataques de boko Haram".Colaboración en los campos con mayor volumen de desplazados
Desde agosto de 2014, MSF colabora con clínicas, fijas y móviles, en los dos campos de desplazados de mayor volumen. "Queremos incrementar nuestra ayuda a los desplazados, así que estamos preparándonos para llegar a un tercer campo".
"Las mayores necesidades ahora mismo son las relacionadas con la comida, el tener un techo bajo el que dormir y, por supuesto, los cuidados médicos", ha destacado, para añadir que "hasta el momento el Gobierno de Nigeria ayuda a los desplazados, dando respuesta a sus necesidades, aunque sea de manera parcial. Pero si el número de desplazados aumenta, lo cual es de esperar, se va a necesitar mucha más ayuda".
Médicos sin Fronteras ha evaluado la situación en los centros de salud de ocho de los campos de Maiduguri y también en Bui. "Se están haciendo hasta 850 consultas por semana, especialmente a pacientes con malaria, diarrea e infecciones respiratorias". Y es que, entre el 4 y el 6% de los niños presentan desnutrición aguda y las víctimas "por trauma y violencia se cuentan por docenas", ha incidido.
Plan de apoyo a los centros de salud
"Como parte de nuestro plan para dar apoyo a los centros de salud, levantaremos clínicas fijas en tres acmpos, que estarán abiertas los siete días de la semana para consultas regulares -con tratamiento de desnutrición y consultas antenatales- e implementaremos un sistema para referir a los pacientes más graves hasta el hospital".
"También hemos evaluado algunos hospitales y centros de salud en el resto del Estado. Iniciaremos actividades en la clínica de Maimussari, uno de los distritos de Maiduguri, dado que el número de pacientes ha aumentado con la llegada de desplazados" -de 25.000 en 2011 se ha pasado a 127.000 en 2014-.
"Ofreceremos cuidado antenatal y consulta médica general, aumentaremos el número de camas para aquellos pacientes que haya que ingresar y atenderemos partos las 24 horas", ha destacado para recordar que a mediados de este mes se iniciará la formación al personal del hospital de Maiduguri para la gestión de "emergencias en masa y luego la extenderemos a Mongono, un área remota con 300.000 habitantes en el norte de Borno, donde comenzaremos a trabajar más adelante".
Finalmente, MSF ha dispuesto sistemas de vigilancia epidemiológica para dar respuesta inmediata a enfermedaes contagiosas en lso campos e iniciar vacunaciones masivas en el caso de que sean necesarias", ha concluido.
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