Médicos sin Fronteras pide respeto a la privacidad de la cooperante navarra

  • Médicos sin Fronteras (MSF) ha pedido respeto a la privacidad y el anonimato de la cooperante navarra de esta ONG que ha sido repatriada desde Mali ante la posibilidad de que pudiera haberse contagiado con el virus del Ébola.

Pamplona, 21 nov.- Médicos sin Fronteras (MSF) ha pedido respeto a la privacidad y el anonimato de la cooperante navarra de esta ONG que ha sido repatriada desde Mali ante la posibilidad de que pudiera haberse contagiado con el virus del Ébola.

Teresa Guilarte, delegada de MSF en la zona norte, de la que depende Navarra, ha comentado a Efe que no van a facilitar ningún dato sobre la cooperante, que ha pedido específicamente que se mantenga su anonimato, "por confidencialidad médica y por respeto a ella y a su trabajo".

Desde la sede de MSF en Bilbao, la portavoz de la ONG ha explicado que el incidente sobre un posible contagio tuvo lugar en la madrugada del jueves cuando la cooperante se pinchó con una aguja que había estado en contacto con material contaminado.

Inmediatamente, la médico se desinfectó el área del pinchazo con agua clorada, notificó el hecho y a partir de ahí se puso en marcha el protocolo de evacuación, porque existe un riesgo alto de contagio.

Mientras no haya pruebas de laboratorio, no se sabrá si la cooperante navarra está infectada, ha destacado Guilarte, que ha hecho hincapié en que "cuando estás trabajando en una intervención tan compleja" como la lucha contra el ébola, "el riesgo cero no existe".

"Todos nuestros equipos y las personas que están trabajando son conscientes de que son riesgos que se asumen, dentro de la máxima seguridad de los protocolos", ha apuntado.

MSF trabaja en Mali desde el 24 de octubre, cuando se declaró oficialmente el primer caso de ébola, y ha reforzado los medios materiales y humanos en el país a partir del 11 de noviembre cuando se confirmaron los primeros casos en Bamako, la capital.

En total, MSF ha desplazado unos 300 cooperantes internacionales a Sierra Leona, Liberia, Guinea y Mali, y hay otros 3.000 nacionales de estos cuatro países trabajando en los equipos de la ONG en la lucha contra el ébola.

Guilarte ha hecho un llamamiento a la sociedad a que se involucre y apoye a las ONG que trabajan en África, porque en Sierra Leona, Liberia y Guinea la situación de la epidemia de ébola es "dramática y descontrolada" y la comunidad internacional no está dando "la respuesta que se necesita".

La portavoz de MSF ha pedido que no se olvide que los trabajadores sanitarios que están "en primera línea en África, en el foco donde la situación es desbordante y muy grave", están haciendo "un trabajo ímprobo, asumiendo unos riesgos" importantes.

Estos sanitarios, tanto los cooperantes internacionales como los nacionales de los países afectados, "merecen todo el apoyo, tanto social como político e institucional, y todo el respeto y toda la privacidad", ha subrayado.

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