Managua, 6 abr.- Miles de católicos nicaragüenses pidieron hoy "fortaleza" a Cristo al culminar el tradicional viacrucis penitencial del Viernes Santo en Managua.
En el mensaje central de la procesión, el arzobispo de la Arquidiócesis de Managua, Leopoldo Brenes, dijo a los feligreses católicos que "la sangre de Cristo da fortaleza".
"El papa Benedicto XVI dice que cuando nosotros hablamos, el Señor nos escucha. Pues hoy todos nosotros hablémosle al Señor a través de esta preciosa imagen" de Cristo, para agradecerle por sus milagros, agregó el prelado católico.
Los devotos desafiaron hoy el fuerte sol de Managua con paraguas, sombreros y vestidos de blanco en cada una de las catorce estaciones del viacrucis, que partió desde el Colegio Teresiano y finalizó en el atrio de la catedral metropolitana, en la periferia sur de esta capital.
Entre los feligreses destacaban niños vestidos de ángeles, algunos adultos que recorrieron el trayecto de rodillas, pagando promesas, y otros que leyeron pasajes bíblicos en cada una de las estaciones del viacrucis, que representan la pasión y muerte de Cristo.
Además, algunas personas obsequiaron agua, bebidas naturales, alimentos y estampas con la imagen de Cristo a los feligreses que acudieron a la procesión.
En la actividad, encabezada por Brenes, también participó el nuncio papal, Henry Novasky, quien acompañó a la sagrada imagen de Cristo en su recorrido de más de cuatro de horas, pese a estar enfermo.
Agentes de la Policía nicaragüense y voluntarios de los bomberos y la Cruz Roja resguardaron la seguridad y el orden en la multitudinaria procesión.
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