Miles de personas rememoran en El Rocío la salvación en Guerra Independencia

Almonte (Huelva), 19 ago.- Miles de personas han celebrado hoy en la aldea de El Rocío el acto central del denominado "Rocío Chico", en el que el pueblo almonteño renueva cada año su voto de acción de gracias a la Virgen del Rocío por haberlos "salvado" de la invasión de las tropas francesas en 1812.

El Ayuntamiento de Almonte ha informado a Efe de que este año se han superado las 100.000 personas que el año pasado se acercaron por la aldea coincidiendo con esta celebración, algo que se debe principalmente a que el Rocío Chico coincide con la Venida de la Virgen del Rocío a Almonte (Huelva) que tendrá lugar esta tarde.

Tras el triduo preparatorio y el rosario, esta mañana se ha celebrado la Solemne Función del Voto, en su 199 aniversario, presidida por el obispo de Huelva, José Vilaplana.

La misa ha finalizado con la exposición de Jesús Sacramentado en el presbiterio del Santuario y su procesión bajo palio por el itinerario tradicional dentro de la aldea de El Rocío, en los alrededores de la ermita.

Tras la procesión se ha procedido a la imposición de las medallas a los 180 nuevos hermanos de la matriz almonteña culminando una serie de actos que se han desarrollado en la aldea durante toda la semana.

Además de los vecinos de Almonte, en los actos han participado cientos de personas que se encuentran pasando el verano en la aldea y que se encuentran a la espera de que esta tarde los almonteños saquen a la Virgen en procesión por la aldea y a la caída de la tarde, tapen a la imagen y la conduzcan hasta Almonte, donde permanecerá los próximos nueve meses.

La coincidencia entre la Venida de la Virgen y el Rocío Chico, que celebra su bicentenario, ha motivado que el Papa Benedicto XVI haya otorgado al Rocío el Año Santo Jubilar Mariano inaugurado el pasado miércoles y que se extenderá hasta septiembre de 2013.

Todos los actos del Rocío Chico recuerdan una tradición que comenzó en 1813 cuando se instituyó la acción de gracias a la Virgen del Rocío por su intervención en la Guerra de la Independencia española.

Según la tradición que se rememora cada año, la Virgen impidió, gracias a los rezos de los almonteños, que las tropas francesas arrasaran la localidad de Almonte tras la negativa de la población a incorporarse a las fuerzas galas y haberse amotinado.

La actitud de los franceses llevó al pueblo de Almonte a alzarse contra la orden, para lo que prepararon un motín en el que perdió la vida el comandante francés Pierre Dossau.

Esto motivó que el mariscal Shoult ordenara arrasar "a fuego y cuchillo" el municipio almonteño, pero, como apuntan las crónicas de la época, una "misteriosa" contraorden hizo retroceder a las fuerzas galas, supuestamente como consecuencia del rezo que en la noche anterior el clero y los vecinos de la localidad encomendaron a la Virgen de El Rocío.