Nepal. Unicef ya ha comenzado a repartir ayuda para 1,7 millones de niños


El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha distribuido en los últimos dos días 29 toneladas métricas de suministros humanitarios, como tiendas de campaña, pastillas para potabilizar el agua y kits de higiene y de primeros auxilios, como parte de su labor para llegar a unos 1,7 millones de niños que viven en áreas gravemente afectadas por el terremoto de Nepal.
Además, esta agencia de la ONU afirmó este jueves que tiene previsto enviar más suministros vitales en los próximos días a Katmandú.
Raju Shreshta, jefe de logística de la División de Suministros de Unicef en Copenhague (Dinamarca), señaló que “la vida de los niños en Nepal se ha vuelto del revés”.
“Miles han muerto, las casas están destruidas. Mi familia y amigos en Nepal también están atrapados en el desastre. Faltan suministros médicos y camas en los hospitales. Unicef ha enviado tiendas de campaña a Nepal para ser usadas como clínicas y como refugio para los niños que lo necesitan urgentemente. También estamos enviando pastillas para potabilizar el agua, para asegurar que los niños y sus familias tengan acceso a agua potable”, explicó.
Pocas horas después de que el terremoto devastara muchas zonas de Nepal, Unicef envió a las comunidades afectadas pastillas para potabilizar el agua, sales de rehidratación oral y kits de higiene, gracias a las 30 toneladas métricas de suministros de emergencia que ya estaban preparados en almacenes de esta organización en Nepal.
Esto ayudará a las familias sin acceso a agua potable como consecuencia del seísmo a prevenir las enfermedades que se transmiten por este medio. En Katmandú se han establecido más de una docena de asentamientos informales y Unicef y sus aliados están llevando a todos ellos agua potable y artículos de higiene.
Unicef y sus aliados trabajan con el Gobierno de Nepal para garantizar que la ayuda humanitaria sea enviada y distribuida en las comunidades afectadas lo más rápido posible mediante una combinación de envíos en vuelos chárter y comerciales.
Las agencias humanitarias luchan contra los importantes retrasos debidos a las restricciones técnicas sobre el peso máximo de aterrizaje y el uso de aviones de fuselaje ancho. La congestión del aeropuerto de Katmandú, debido a la capacidad limitada de almacenamiento y a los medios limitados para distribuir la carga entrante, ha agravado los problemas logísticos.
Unicef ha hecho un llamamiento por valor de 50 millones de dólares (45,6 millones de euros) para dar apoyo a su respuesta humanitaria ante el terremoto en Nepal durante los próximos 90 días.

Mostrar comentarios