Nuevo entierro para la heroína de Solidaridad tras una confusión de tumbas

  • La heroína del sindicato Solidaridad, Anna Walentynowicz, fallecida en el accidente aéreo de Smolensk (Rusia) en 2010, fue enterrada hoy en Gdansk por segunda vez, después de que las autoridades polacas descubriesen que sus restos habían sido depositados en una tumba correspondiente a otra persona.

Varsovia, 28 sep.- La heroína del sindicato Solidaridad, Anna Walentynowicz, fallecida en el accidente aéreo de Smolensk (Rusia) en 2010, fue enterrada hoy en Gdansk por segunda vez, después de que las autoridades polacas descubriesen que sus restos habían sido depositados en una tumba correspondiente a otra persona.

Al funeral asistieron miembros de Solidaridad y del principal partido de la oposición de Polonia, Ley y Justicia, incluido su líder, Jaroslaw Kaczynski, quien lamentó la pasividad del Gobierno de Donald Tusk ante el drama que viven las familias de los fallecidos en Smolensk.

Algunos de los asistentes lanzaron consignas contra el Ejecutivo, al que acusaron de manchar la memoria de las víctimas y ocultar la verdad sobre el siniestro, donde perdieron la vida los 96 ocupantes del avión presidencial polaco, incluido el entonces jefe de Estado, Lech Kaczynski.

Anna Walentynowicz fue una de las activistas más destacadas de Solidaridad durante los años 70 y 80, cuando con Lech Walesa a la cabeza el sindicato plantó cara a la dictadura comunista y forzó la llegada de la democracia.

La semana pasada expertos exhumaron el cuerpo de la mujer y sometieron los restos a pruebas de ADN para confirmar lo que ya venían denunciando sus familiares: que la persona enterrada en Gdansk no era Anna Walentynowicz, sino otra de las víctimas de la tragedia de Smolensk.

A bordo del aparato siniestrado viajaban altas autoridades civiles, militares y religiosas de Polonia.

Tras el siniestro los expertos rusos llevaron a cabo sobre el terreno las autopsias de las víctimas, dificultadas por la premura y el estado de los cadáveres, en muchos casos completamente destrozados y con restos diseminados, lo que habría provocado errores en la identificación de los muertos.

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