San Salvador, 26 may.- El Sistema de Naciones Unidas en El Salvador condenó hoy "enérgicamente" el repunte de violencia que dejó al menos 81 muertos desde el viernes en el país e instó al Estado salvadoreño a enfrentar "eficazmente" ese flagelo.
La oficina del organismo mundial en San Salvador dijo en un comunicado que "el Sistema de las Naciones Unidas en El Salvador condena enérgicamente las acciones de violencia que provocaron la muerte 81 personas durante el fin de semana".
Añadió que "alienta al Estado salvadoreño a proteger el derecho a la vida y a la integridad humana, así como a implementar estrategias para enfrentar eficazmente y con la participación de toda la sociedad, la violencia en todas sus manifestaciones".
Naciones Unidas también "anima a ampliar los esfuerzos por mejorar la eficacia de los sistemas de justicia e investigación criminal" salvadoreños, apuntó el comunicado.
Entre las estrategias para enfrentar la violencia en El Salvador, la ONU mencionó "prohibir la portación de armas de fuego, recuperar los espacios públicos comunitarios, ampliar masivamente las oportunidades de inserción socio económica de la población, garantizar que las escuelas sean libres de violencia".
Además, "dotar de más y mejores herramientas y conocimientos a las instancias de seguridad pública, y crear espacios de diálogo que tiendan a reducir la confrontación y la violencia a nivel territorial, entre otras", apuntó el organismo mundial.
También instó a "cesar cuanto antes la violencia contra grupos especialmente vulnerables como la niñez y las mujeres".
El director del estatal Instituto de Medicina Legal, José Miguel Fortín, confirmó hoy que la espiral de violencia se cobró la vida de 81 personas entre el viernes y las primeras horas de este lunes.
Como producto de ese repunte, el promedio diario de homicidios en el país se elevó a 14,3, ligeramente superior al de 14 que había cuando una "tregua" entre pandillas empezó a bajar los asesinatos en marzo de 2012, según Fortín.
Poco antes, el presidente salvadoreño, Mauricio Funes, había reconocido hoy que "la tregua ha fracasado" y que el promedio diario de homicidios volvió a ser de 14, como antes de ese pacto.
El mandatario atribuyó el aumento de asesinatos a grupos del "crimen organizado" que tienen "motivaciones políticas" para afectar a su Gobierno y al que asumirá el 1 de junio próximo, presidido por Salvador Sánchez Cerén.
Funes niega que su Gobierno haya negociado con las pandillas para que dejaran de matar y sostiene que sólo fue un "facilitador" de la "tregua".
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