Kabul, 27 sep.- La misión de la OTAN en Afganistán, que lidera EEUU, aseguró hoy estar investigando el lanzamiento indiscriminado en los últimos meses de cientos de proyectiles contra territorio afgano desde Pakistán.
"Estamos chequeando los informes que hemos recibido. Apoyamos a las autoridades y las fuerzas de seguridad afganas", dijo en una rueda de prensa en Kabul un portavoz de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN, Carsten Jacobson.
Jacobson, citado por la agencia local AIP, subrayó que la ISAF no tomará ninguna decisión "hasta que se conozca la realidad de los hechos".
El Gobierno de Afganistán llegó a acusar el pasado julio a la Policía fronteriza paquistaní de haber lanzado más de 700 proyectiles, que causaron supuestamente un elevado número de víctimas civiles.
Los cohetes golpearon puntos de las provincias orientales afganas de Kunar y Nuristán, situadas en la porosa frontera que divide a los dos países.
Las autoridades de Pakistán han insistido por su parte en que sus fuerzas han sido asaltadas en los últimos tiempo con frecuencia por insurgentes que provienen de territorio afgano.
La implicación ahora de la ISAF en un asunto aparentemente bilateral llega pocos días después de que el jefe del Estado Mayor Conjunto de EEUU, Mike Mullen, acusase a uno de los grupos insurgentes más activos en Afganistán, la red Haqqani, de ser "un verdadero brazo" de los servicios secretos de Pakistán.
Esta declaración ha despertado grandes críticas en la cúpula civil y militar paquistaní.
Las relaciones entre EEUU y Pakistán se hallan en un momento delicado, sobre todo a raíz de la operación unilateral de las fuerzas especiales estadounidenses que acabó el pasado mayo con la vida de Osama Bin Laden en la ciudad paquistaní de Abbottabad.
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