Ouattara toma posesión en costa de marfil con demandas de que investigue los crímenes de los últimos 12 años

Alassane Ouattara ejercerá formalmente desde este sábado como presidente de Costa de Marfil tras una ceremonia de investidura en Yamusukro, la capital política marfileña, con las demandas de que tome las medidas necesarias para que se investiguen los crímenes cometidos en este país en los últimos 12 años y con preocupaciones sobre las "críticas y urgentes" necesidades médicas del Estado.
Ouattara será investido después de una crisis de casi seis meses provocada por la negativa de Laurent Gbagbo a dejar la Presidencia del Gobierno tras las elecciones del pasado 28 de noviembre, lo que provocó un conflicto entre partidarios de ambos líderes.
Human Rights Watch (HRW) señaló en una carta que Ouattara debe actuar "rápidamente" para que rindan cuentas los responsables de los "graves crímenes" cometidos en Costa de Marfil en los últimos 12 años.
Además, le instó a tomar "medidas urgentes" para erradicar la división del país a través de un "sistema judicial profesional e independiente" y garantizando la disciplina en las fuerzas de seguridad.
Corinne Dufka, investigadora principal de HRW en África Occidental, subrayó que Costa de Marfil es "una nación profundamente fracturada aún" y "todavía conmocionado por los horrores de los últimos meses".
Por su parte, Médicos Sin Fronteras (MSF) afirmó que "las necesidades médicas del país aún siguen siendo enormemente críticas y urgentes".
"En Abiyán, los centros de salud y hospitales están abarrotados de pacientes, siguen llegando nuevos heridos de bala, y los suministros médicos y farmacéuticos que hay en la ciudad son todavía muy escasos", agregó.
MSF subrayó que la situación "sigue siendo extremadamente tensa" al oeste del país, "con muchas aldeas todavía desiertas y sus habitantes escondidos en el monte".
"Algunas personas van regresando poco a poco a sus hogares para intentar reanudar su vida cotidiana, pero sigue habiendo más de 100.000 personas refugiadas en Liberia y decenas de miles más en los hacinados campos de desplazados del oeste de Costa de Marfil", apostilló.