Lugo.- El gremio de panaderos de Lugo reconstruyó con pan integral y rallado una réplica de la muralla de Lugo que hoy se exhibe en una carpa situado en la plaza Mayor, coincidiendo con la campaña "Pan cada día" del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino.
La muralla alcanza 2,6 metros de perímetro y 0,7 de alto, con los muros de la fortificación reconstruidos con pan integral, por la similitud con las piedra del monumento, y el pan rallado se usó ara la superficie del adarve.
Además, los panaderos lucenses regalaron mil mini-bocadillos en la jornada destinada a concienciar de la importancia del consumo de pan para una dieta sana y equilibrada.
La comunidad gallega está por encima de la media nacional en el consumo de pan en el ámbito doméstico (44,1 kilogramos por persona año), cuando ese consumo medio es de 37,39 kilogramos por año, según datos aportados por la secretaría técnica de esa campaña que hoy se ha impulsado en 12 capitales españolas.
La presidenta de la patronal lucense de panaderos, Lupe Gómez reconoció a Efe que el consumo de pan descendió "notablemente", aunque observó que se mantiene "bastante estable" desde el año 2004.
También concretó que mientras se reduce el consumo de pan convencional se ha incrementado el de otras modalidades como integral o sin sal, que, reconoció, "cada vez se venden más".
Además, en la carpa se facilitó información sobre el pan y la nutrición saludable, para destruir algunos mitos como que comer pan engorda, que la miga es la parte más perjudicial o que el pan tostado es mejor para realizar dietas hipocalóricas.
También se advierte que es "falso" que el pan integral tenga menos calorías que el pan blanco o que el pan precocido es menos saludable.
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