Beirut, 9 sep.- El patriarca maronita (católico de Oriente), monseñor Bechara Rai, expresó hoy su esperanza de que la visita del papa Benedicto XVI al Líbano, prevista entre los próximos días 14 y 16, refuerce el "mensaje de paz" en Oriente Medio.
"Los cristianos no pueden olvidar su identidad y tienen un mensaje para difundir en el Líbano y en Oriente Medio" dijo hoy el prelado en un sermón en la iglesia San Antonio el Grande, en la localidad de Fuwara, en la región del Chuf (centro), donde realiza una visita pastoral.
Precisamente esta mañana, Benedicto XVI afirmó que su próximo viaje al Líbano será "bajo el signo de la paz", en una alocución pronunciada en francés tras el rezo del Ángelus celebrado en Castelgandolfo (cerca de Roma).
E instó a todas las autoridades y a la comunidad internacional a que la búsqueda del diálogo y de la reconciliación sean prioritarios en Oriente Medio.
Joseph Ratzinger viajará al Líbano para firmar la exhortación apostólica post-sinodal, fruto de la Asamblea especial para Medio Oriente del Sínodo de los obispos que se celebró en octubre de 2010.
A ese respecto, monseñor Rai manifestó su esperanza de que ese documento final "conduzca a una primavera cristiana y libanesa que incorpore valores morales y diversos en el mundo árabe para que haya una verdadera primavera árabe".
En su sermón de hoy en la diócesis de Biblos, en el centro del país, el obispo de la ciudad, monseñor Michel Aoun, explicó que los actos del sínodo son una "hoja de ruta para los cristianos del Líbano y Medio Oriente".
"Todos sabemos que (los cristianos) experimentan dificultades por la situación política y regional, y están expuestos a la emigración", subrayó el obispo, para quien "el Vaticano y el papa no son indiferentes a esta situación, que se agrava cada día y pone en peligro la presencia de los cristianos en Oriente Medio".
Según monseñor Aoun, la visita del santo padre es un "mensaje de esperanza", por lo que "cristianos y musulmanes deben abrir sus corazones y mentes".
"El papa desea que se preserve la coexistencia e insta a todos a practicarla no sólo en el Líbano, sino también en los países de Oriente Medio, sobre todos, en aquellos que pasan por problemas y donde la presencia de los cristianos está amenazada", indicó.
A su juicio, es "más urgente" el compromiso de la Iglesia con las comunidades cristianas tras la primavera árabe y la situación en Siria.
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