¿Por qué se huye de Venezuela? A las 4 de la tarde salir a la calle da miedo

"Entraron en la casa tres personas con armas y nos amenazaron". Así comienza Aminda García el relato del secuestro que vivió mientras se encontraba con su familia y amigos en una casa de Venezuela, que cuenta con el deleznable honor de albergarla ciudad más violenta del mundo: Caracas. Y no solo faltan ya papel higiénico sino también medicamentos. Venezuela ha decretado una crisis humanitaria al respecto.

Aminda acudió con su familia la casa de su amiga, que se encontraba en un lugar aislado. Lo que menos imaginó Aminda es que aquel día viviría un secuestro que marcaría su destino."Pensé que podían violarnos"

"Nos tiraron al piso y cerraron las ventanas", describe con la angustia en los ojos. "Yo estaba con mi hija de 18 años y una niña de 3 años y me preguntaba ¿Y si a esta gente le da por violarnos?".

Los ladrones se llevaron los coches y todo cuanto pudieron sin llegar a agredir físicamente a ninguno de los que se encontraba en la vivienda. "Yo estuve casi 5 hora encima de mi hija para que ni la vieran, fueron horas de angustia", afirma de manera rotunda la venezolana de mediana edad.

La impotencia de Aminda surgió cuando acudieron a la policía judicial a denunciar los hechos y, muy lejos de tomar nota de la denuncia y comenzar a buscar a los asaltantes, respondieron "está todo bien porque no les pasó nada".

Aminda, vivía en Valencia cuando hace 8 años decidió mudarse junto con su marido y sus dos hijos a España debido a la creciente inseguridad en Venezuela. "En 3-4 años pasaron varias cosas muy fuertes: sufrimos un secuestro, mi esposo perdió el trabajo, tuvimos problemas con la Fiscalía en relación a un accidente y, después fuimos viendo que ya no éramos parte de la sociedad, éramos como exiliados en nuestro propio país".

Hace 8 años, en una visita a la familia de España (su marido es hijo de españoles), Aminda y su esposo comenzaron a plantearse emigrar España, algo que "nunca se les había pasado por la mente".

En Venezuela "salíamos a la calle y teníamos miedo, estábamos paranoicos", en cambio, cuando "nos vinimos empezamos a ver cómo se vive sin miedo".
Aminda explica que la razón de emigrar fue mirar por un buen porvenir para sus hijos que, en ese momento, tenían 18 y 19 años. En la actualidad, "mi hijo vive en Alemania y mi hija en España y tienen sus hijos. Yo los veo y digo: tomé la mejor decisión".

"Me duele mi país, quisiera estar allí, y me duele mi gente, allí tengo toda mi familia pero entonces veo a mis hijos y digo 'vale la pena'", declara con los ojos bañados en lágrimas.¿Cuánto vale la vida?

"He perdido un familiar y, cuando estuve viviendo en Caracas, me robaron en varias ocasiones Me apuntaron con armas, una vez trataron de ahorcarme para robarme", cuenta Eduardo Castillo, un joven emprendedor procedente de la ciudad venezolana Barquisimeto.

Eduardo decidió, como muchos otros estudiantes venezolanos, cursar un máster en España. Tras dos años y dos meses en España, experto en consultoría política confiesa que llegó al país a estudiar "con la esperanza de volver para trabajar por el cambio".

Castillo comenzó a trabajar en política en Venezuela mientras cursaba su último año en la universidad y vivió de lleno "persecuciones, amenazas, incluso en la misma universidad".

La violencia en el país sudamericano sigue una tendencia ascendente. "Yo me fui con la esperanza sincera de volver a trabajar en mi país, sin embargo, justo el año que yo me fui tuvo lugar la muerte de Chávez que parece que fue cuando todo explotó", explica el joven.

La inseguridad se convierte es la principal razón que conviertes a muchos venezolanos en emigrantes. "Antes Chávez era como una especie de dique que contenía todo lo malo que estaba subyacente en el proceso y, cuando él muere todo explota: la inflación, la inseguridad, etc.", afirma Eduardo Castillo.

Por su lado, Cristofer Correia decidió abandonar Venezuela para formarse, trabajar y regresar para luchar por el cambio de la nación. Dos años y medio después de haber dejado Venezuela explica que existen dos razones principales que hacen que un venezolano tome la decisión de cruzar fronteras y alejarse de su tierra natal.

"Se cumplen dos condiciones. Por un lado, sientes que la situación es invivible por la inseguridad y, por otro, sientes que no va a haber un cambio de la situación, un cambio político a corto-medio plazo", explica el joven consultor venezolano procedente de Caracas en el día en el que la capital venezolana es declarada la ciudad más peligrosa del mundo.

A pesar de la situación de violencia, los resultados de las últimas elecciones en Venezuela han devuelto la ilusión a un venezolano inquieto y lleno de fuerza que pretende luchar por su país. "Yo recuperé la esperanza de que Venezuela va a cambiar y por eso voy a regresar. En un mes estoy viviendo de nuevo en Venezuela", afirma Correia con una amplia sonrisa.

La postura de Cristofer es muy contraria a la de Eduardo Castillo quien afirma: "Venezuela es el país más peligroso, yo no veo mi futuro ahí. El sueldo que podría ganar allá no compensa la inseguridad que se vive. Me pregunto ¿Cuánto vale la vida?".A las 4 de la tarde Venezuela se encierra en sus casas

Aumentó la venta de cercas eléctricas a las propiedades para evitar robos. "Si sales a la calle a trabajar, tienes que llegar a tu casa a las 4-5 de la tarde porque cuando se hace de noche todo el mundo se encierra", declara Eduardo Castillo.

"Una vez, observando un atraco, llamamos a la policía, con los ladrones allí y nos dijeron "¿Pero han matado a alguien?" y les respondimos que estaban abajo con la pistola, a lo que respondieron: "Ah no, pero ustedes no se preocupen, si no se ha muerto nadie…", relata Aminda García. La venezolana confiesa sentir impotencia ante la actitud que muestran las instituciones ante situaciones de violencia como la descrita.

"La vida de la gente no vale nada", declara Aminda. Recuerda cómo vivió el incremento de la violencia en el país antes de decidir emigrar a España. Asegura que la inseguridad llega a tal nivel que "ni siquiera la gente puede estar en los tanatorios, los cierran a las 6 de la tarde porque entran, y uno está con el cadáver y te roban"."Es humillante para un ser humano ir a un mercado y no conseguir comida"

"Mi madre padece lupus y le tengo que mandar medicinas cada vez que voy, comprar 10 cajas en distintas farmacias y llevárselas", relata Cristofer Correia. El joven consultor asegura que casi imposible conseguir cualquier medicamento genérico.

Farmatodo, la cadena líder en farmacias del país ha creado una aplicación para ver en qué farmacia del país puedes encontrar el medicamento que se busca. "Pones Ibuprofeno y te dice "no hay en ninguna farmacia de Caracas"", explica Cristofer.

Asimismo hay falta de recursos en los hospitales. "Vas por una emergencia hospitalaria y no te pueden atender porque no tienen de nada. ¿Qué clase de vida se puede tener así?", afirma Eduardo Castillo.

Además de falta de medicamentos, también escasea la comida. "Es degradante, humillante para un ser humano que vayas a un mercado y no consigas comida y que solo puedes comprar un día a la semana dependiendo de tu número de DNI", declara Castillo.