Reclaman 350.000 euros por la muerte de una mujer tras 5 años sin tratamiento

Sevilla, 4 ene.- La familia de una mujer que falleció a los 54 años ha reclamado a la Junta de Andalucía una indemnización de 350.000 euros porque presuntamente la enferma estuvo cinco años sin tratamiento tras ser operada de un melanoma o cáncer de piel que poco después se diseminó por todo su organismo.

En su reclamación ante el juzgado de lo Contencioso Administrativo de Sevilla, a la que ha tenido acceso Efe, el esposo y tres hijos de la fallecida afirman que en este caso se produjo un "incumplimiento total y absoluto de las pautas clínicas y médicas más elementales que rigen el seguimiento del melanoma", por lo que "se puede imputar a la Administración sanitaria el resultado fatal de la muerte de la paciente".

María del Carmen G.N. falleció en el hospital de Valme de Sevilla el 3 de febrero de 2012, como consecuencia de los tumores que presentaba en el cerebro, mama, pulmones, bazo, vesícula biliar y pared gástrica, posible metástasis de un melanoma o cáncer de piel del que fue operada el 21 de febrero de 2006 en el Equipo Quirúrgico sevillano.

Ante los resultados de la biopsia, el 16 de marzo de 2006 fue operada de nuevo en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla para ampliar los márgenes del melanoma diagnosticado y a partir de entonces solo fue vista dos veces en consulta y en junio de 2006 le hicieron una radiografía de tórax, prueba que "resultaba completamente insuficiente para determinar si padecía una metástasis de pequeñas dimensiones".

"A continuación transcurrió la friolera de cinco años sin que la paciente fuera sometida a control, revisión, prueba médica de ninguna clase, periódica o no", sostiene el abogado de la familia, Antonio Moreno Bautista.

En mayo de 2011, la paciente fue atendida en Urgencias del Servicio Andaluz de Salud (SAS) de parestesias en los dedos de la mano, pero de nuevo no fue sometida a prueba alguna para detectar la posible reproducción del melanoma, pese a que ya en ese momento "tenía completamente diseminada la enfermedad por la práctica totalidad de su cuerpo" y a ello se debía el cuadro de malestar general que presentaba.

La reclamación dice que examinado todo el expediente, se concluye que se produjo "un retraso extraordinario en el diagnóstico de la reproducción del melanoma", por lo que es aplicable a este caso la doctrina jurisprudencial de la "pérdida de oportunidad".

No fue hasta el 27 de junio de 2011 cuando un TAC de cráneo detectó lesiones sugestivas de metástasis y entonces permaneció ingresada hasta el 14 de julio para ser sometida a diversas pruebas que detectaron neoplasias en el pulmón, bazo, adrenal izquierda, ganglios linfáticos abdominales, epiplón y posiblemente también en la vesícula biliar y pared gástrica.

Moreno Bautista sostiene que cuando la paciente fue debidamente atendida sufría unas lesiones que "equivalían a una sentencia de muerte" tras un "inaudito grado de desatención y abandono" y una "inexplicable desatención médica" que atribuye a un intento "puro y duro de ahorrar costes".

Por ello, reclama para la familia de la fallecida 350.000 euros de indemnización, incrementada en los intereses legales y con una condena en costas a la Administración.