Rouco varela apela a los acuerdos con la santa sede ante las “siempre complejas y delicadas relaciones” con el estado


El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Antonio María Rouco Varela, apeló este lunes a cumplir los Acuerdos entre la Santa Sede y el Estado Español de 1979, donde las líneas “están suficientemente bien reguladas” para combatir “el problema de las siempre complejas y delicadas relaciones entre la Iglesia y Estado”.
Rouco Varela pronunció estas palabras en el discurso inaugural de la CII Asamblea Plenaria de la CEE, que arrancó este lunes en Madrid. En ella se elegirá el nuevo secretario general, puesto que durante los últimos diez años ha ocupado Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid. Es posible que el nombre del nuevo secretario general se conozca este próximo miércoles.
Durante su intervención, el arzobispo también mostró la preocupación de la CEE por que se rompa “la unión fraterna entre todos los ciudadanos de las distintas comunidades y territorios de España, con muchos siglos de historia común”. Rouco recordó que la CEE se ha posicionado en tres ocasiones sobre el camino a seguir por los católicos españoles en este asunto, criterios, según dijo, fundados en la Doctrina Social de la Iglesia.
“La unidad de la nación española es una parte principal del bien común de nuestra sociedad que ha de ser tratada con responsabilidad moral”, que pasa, añadió, “necesariamente” por “el respeto de las normas básicas de la convivencia”, refiriéndose principalmente a la Constitución.
Rouco Varela también expresó la preocupación de los obispos españoles por que “las heridas causadas por el terrorismo” no se curen “por el camino del arrepentimiento, del propósito de la enmienda y de la satisfacción de las víctimas”, punto este último que entronca con la desilusión que la decisión del Tribunal de Estrasburgo ha causado en las víctimas del terrorismo tras la retirada de la ‘doctrina Parot’.

MATRIMONIO Y FAMILIA
Durante su discurso, Antonio María Rouco Varela también reflejó que “sigue viva” la preocupación “por el presente y el futuro del matrimonio y la familia”. Así, denunció que “las leyes injustas contribuyen mucho al agravamiento de los problemas”, por lo que, en nombre de los obispos, reiteró “la necesidad de leyes reconocedoras y protectoras del matrimonio y de la familia”, pues la actual legislación “compromete seriamente el bien común”, por lo que debe ser “corregida y mejorada”.
Esta preocupación, según la CEE, ha llegado hasta el Papa Francisco, que viendo “la trascendencia del problema”, ha convocado un sínodo de obispos sobre la familia para el mes de octubre de 2014.
Durante el discurso, el presidente de la CEE hizo, a modo de “examen de conciencia”, un balance del Año de la Fe declarado por Benedicto XVI y que termina el próximo domingo 24. Entre otros asuntos también abordó otras preocupaciones como la crisis económica que padece España. “Es necesario reducir sustancialmente el paro”, en especial el que afecta a los jóvenes, exigió, para lo que es necesaria “una conversión moral de todos los agentes sociales”, que tiene que expresarse en forma de “generosidad”.
Rouco subrayó en este punto la labor de Cáritas, sin cuya ayuda “la situación de muchos resultaría insostenible”. El arzobispo de Madrid también recordó la situación de los damnificados por el tifón en Filipinas y la persecución de los cristianos en el mundo, especialmente en Siria.

PASTORES CERCANOS
Tras el discurso de Rouco Varela tomó la palabra el Nuncio Apostólico de la Santa Sede en España, monseñor Renzo Fratini, que rememoró la intención del Papa Francisco de emprender una “nueva evangelización” dirigida hacia “la periferia”, concepto entendido como “necesidad”, y resumido en “los pobres”, según recalcó.
Por ello, Fratini pidió a los obispos españoles que respondan a las preguntas existenciales del hombre de hoy “atendiendo a su lenguaje”, lo que implica también “actitudes y propósito de reforma de vida”. Según añadió el representante del Papa, “los obispos han de ser pastores cercanos a los hombres”, que “aman la pobreza y la austeridad de vida”.
El Nuncio también habló de la próxima visita ‘ad limina’ que los obispos españoles harán en dos grupos entre el 24 de febrero y el 8 de marzo de 2014. Para este encuentro Fratini exigió “una diligente preparación”, pues “la visita expresa la responsabilidad de los obispos como sucesores de los apóstoles”, destacó. Asimismo, mostró el deseo de que la visita ‘ad limina’ “revirtiera en un plan pastoral diocesano que remarque un camino nuevo”.

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