Taiwanés detenido en China se retracta de su confesión tras volver a la isla

  • Un taiwanés del grupo religioso Falun Gong detenido en China durante casi dos meses, acusado de delitos contra la seguridad nacional, se retractó de las confesiones que le permitieron salir de prisión y volver a la isla.

Taipei, 14 ago.- Un taiwanés del grupo religioso Falun Gong detenido en China durante casi dos meses, acusado de delitos contra la seguridad nacional, se retractó de las confesiones que le permitieron salir de prisión y volver a la isla.

Chung Ting-pang, gerente de una empresa tecnológica en Taiwán, dijo hoy ante la prensa que su confesión en China fue "forzada" como condición "necesaria" para su liberación y aseguró que "nunca más volveré a China".

"La llamada confesión y expresión de remordimiento no la hice libremente", dijo Chung.

La liberación del gerente isleño, considerada como un gesto de buena voluntad de China, se produce tras peticiones de los legisladores taiwaneses y de la Octava Ronda de Negociaciones bilaterales, celebradas la semana pasada en Taipei.

Chung, de 53 años de edad, fue detenido en China el 18 de junio cuando intentaba abordar un avión de vuelta a Taiwán, y puesto bajo arresto domiciliario.

La agencia estatal de noticias china Xinhua señaló que Chung, acusado de poner en peligro la seguridad nacional y pública, había sido liberado tras haber "confesado y expresado remordimiento" por sus acciones.

Chung asegura que su visita a China tenía como objetivo visitar a familiares, pero admitió que, desde el 2006, ha estado enviando a miembros del Falun Gong, prohibido en China, equipos de comunicaciones utilizados para emitir programas religiosos.

"Como miembro del Falun Gong lo que he hecho es ayudar a que se conozca de verdad lo que es nuestra doctrina. La gente en China tiene derecho a saber la verdad", apuntó Chung.

La familia de Chung y miembros de Falun Gong en Taiwán y Estados Unidos han recurrido a legisladores y organizado campañas en internet y manifestaciones de protesta para conseguir la liberación del gerente isleño.

China considera Falun Gong una amenaza para la seguridad nacional, y lo prohibió en 1999, cuando contaba con decenas de millones de seguidores.

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