La protesta ha buscado dar visibilidad ante los 15.000 asistentes al concierto a la situación de personas que migraron por razones económicas, además de conflictos, y han reclamado que "no debería haber diferencia" entre estos y los refugiados por motivos bélicos, ha explicado a Europa Press el representante del Sindicato de Vendedores Ambulantes de Barcelona Lamine Bathily.
Bajo lemas como 'Ninguna persona es ilegal' y '¿Qué pasa, qué pasa? Que no tenemos casa', se han concentrado entidades de Barcelona y el área metropolitana, como Tras la Manta, Papeles para todos, Unidad contra el fascismo y el Racismo, así como Papeles sin contrato, entre otras, que también forman parte de 'Casa nostra, casa vostra'.
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