Un marinero del “alakrana”: “dejaron el barco hecho una auténtica mierda lleno de vómitos y cagadas”


El marinero del “Alakrana” Joaquín Fernández Álvarez relató hoy en la Audiencia Nacional que los piratas somalíes que secuestraron el atunero vasco durante 47 días no sólo les sometieron a agresiones físicas y a presión psicológica, sino que dejaron el barco “hecho una auténtica mierda”, arrojando al suelo los restos de comida y de la droga que mascaban y dejando la embarcación “lleno de vómitos, cagadas y meadas”.
“Lo pase muy mal, a veces estoy durmiendo y me despierto sobresaltado porque me vuelven las imágenes”, dijo Fernández Álvarez en el juicio que la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional está celebrando contra Abdu Willy y Raageggesey Hassan Haji, los dos presuntos piratas somalíes acusados de participar en el secuestro y que fueron apresados por los militares españoles.
El testigo, que reconoció a los acusados como parte de los piratas que secuestraron el barco, explicó que fue uno de los tres marineros españoles seleccionados por los asaltantes para ser llevados hasta la costa de Somalia. Los piratas tomaron esta decisión después de enterarse de que Abdu Willy y Hassan Haji habían sido apresados por los militares españoles de la Fragata Canarias.
Aseguraban que los tres marineros elegidos serían llevados a tierra y serían entregados a las familias de Abdu Willy y Hassan Haji, pero en realidad todo fue un “paripé”.
Fernández Álvarez explicó al tribunal que les hicieron subir a una pequeña embarcación y se alejaron “bastante” del “Alakrana” pero, después de que uno de los piratas realizase varios disparos, dieron la vuelta.
Les llevaron de nuevo al atunero y les confinaron en un camarote donde estuvieron recluidos unos nueve días. Durante todo ese tiempo el resto de la tripulación no sabía que los tres marineros estaban en realidad a bordo del “Alakrana” y pensaban que se encontraban en tierra.
PRESIÓN PSICOLÓGICA
El otro marinero que declaró en la sesión de hoy, Pedro Ortún, relató la “mala experiencia” que vivió durante los 47 días que estuvo secuestrado por piratas somalíes a bordo del atunero vasco y aseguro que son hechos de los que se quiere olvidar “por salud y por higiene mental”.
Ortún dijo además tener claro el “modus operandi” de los piratas: “presión psicológica, desestabilización a nivel moral y luego hacernos llamar a las familias para expresar lo mal que nos encontrábamos”. “Fue el súmmum de la presión, yo ahí he visto hombres orinarse”, dijo.
El marinero dijo por último desconocer si se produzco algún tipo de negociación pero señaló que, aunque no vio nada, el día anterior a su liberación escuchó como una avioneta sobrevolaba varias veces el barco.
El fiscal encargado del caso, Jesús Alonso, pide para Abdu Willy y Raageggesey Hassan Haji sendas penas de 220 años de cárcel al acusarles de 36 delitos de detención ilegal -por los 36 tripulantes del atunero- y de un delito adicional de robo con violencia. Las acusaciones particulares ejercidas por cuatro marineros les atribuyen de forma adicional un delito de asociación ilícita.

Mostrar comentarios