Washington celebra con champán y lentejuelas su fiesta por la democracia

  • Caminar en la noche de hoy por Washington es hacerlo entre vestidos de gala, esmóquines y tacones altos, y es que ciudadanos de todo el país comienzan a concentrarse en la ciudad para celebrar por todo lo alto la investidura de Barack Obama.

Raquel Godos

Washington, 19 ene.- Caminar en la noche de hoy por Washington es hacerlo entre vestidos de gala, esmóquines y tacones altos, y es que ciudadanos de todo el país comienzan a concentrarse en la ciudad para celebrar por todo lo alto la investidura de Barack Obama.

Sin importar la ideología política, miles de personas han comenzado a peregrinar a la ciudad para asistir a las fiestas que acompañan a la segunda toma de posesión del demócrata, en una suerte de homenaje a la democracia bañado en champán y lentejuelas.

Es el caso de Erica Enjady, que ha viajado con su marido desde Mescatero, en el estado de Nuevo México, para acudir a la mayoría de los actos que salpican estos días la capital.

"Surgió la oportunidad y nos dijimos que había que aprovecharla. Ver ya lleno de gente el National Mall -los jardines que unen el Capitolio con el Obelisco de Washington donde jurará Obama el lunes- es impresionante", dijo a Efe Enjady en la fiesta que esta noche celebraba la Asociación del Estado de Nuevo México

Rodeada de mujeres vestidas de largo y algunos hombres con sombrero típico de ese estado, Erica confiesa estar emocionada por haber venido a la capital y poder participar en "este momento histórico".

La música en directo sonaba de fondo mientras los camareros no cesaban de rellenar las copas de los asistentes que, siempre con atuendos de gala, recorrían de un lado para otro el Instituto Carnegie, donde tuvo lugar la fiesta, a apenas unas calles de la Casa Blanca.

Andrea Coleman vive en Carolina del Norte, pero su hermana vive en Washington y tampoco quiso perder la oportunidad de acudir a esta fiesta, aunque no viva en Nuevo México.

"Fuimos allí al instituto cuando éramos adolescentes, mi padre era militar y estaba destinado allí. Así que cuando nos enteramos quisimos venir a la celebración de Nuevo México para reencontrarnos con algunos amigos", explicó a Efe Coleman, que, sentada en una de las escaleras del edificio, se resiente ya de sus tacones de aguja.

Al igual que la mayoría de los asistentes a la fiesta, ella ha venido desde fuera de la ciudad, concretamente desde Greensboro, "sólo para la investidura".

"La gente quiere unirse en el esfuerzo de que todo mejore en este país, por eso hay republicanos y demócratas celebrando todo esto. Es una alegría estar aquí, una ocasión única", añade.

Al igual que la fiesta de la Asociación del Estado de Nuevo México, entre hoy y mañana muchos de los estados tendrán sus propias celebraciones, con música en vivo y en algunos casos con invitados de gala.

La actriz Eva Longoria presentará la gran fiesta latina el domingo en el Kennedy Center, con invitados como José Feliciano, Rita Moreno, Chita Rivera, Melanie Griffith, George López y Robert Rodríguez, cuya entrada cuesta 300 dólares y que busca impulsar el entusiasmo por la política de los hispanos que votaron a Obama en noviembre.

El rapero Will.i.Am asistirá a varios eventos lúdicos y actuó hoy en la fiesta Ourtime, donde también estuvo el cantante John Legend y los grupos Flo'rida y Common, además de la actriz Jessica Alba.

En la ciudad de la política no podía faltar una reunión de diplomáticos, que tendrá lugar el lunes, ni una fiesta de recaudación de fondos para una buena causa, como la dedicada a ayudar a los afectados por la tormenta "Sandy" que barrió el noroeste del país en noviembre.

Las opciones públicas no carecen de "glamour", pero los verdaderos afortunados serán, a todas luces, los 4.000 militares y veteranos que cambiarán el uniforme por un esmoquin para bailar el lunes, junto a Obama, al ritmo de Katy Perry, Smokey Robinson, Stevie Wonder o Marc Anthony.

Mostrar comentarios