2011, el año del dopaje

La 'Operación Galgo' saltó a los medios en abril del año pasado y ató cabos en 2011. Marta Domínguez, campeona mundial de los 3.000 metros obstáculos, fue absuelta de las acusaciones de tráfico de sustancias y delito fiscal. Sometida a un acoso mediático voraz, medios como el diario Marca pidieron públicamente perdón a la atleta palentina, que, acompañada de su abogado, compareció en junio en la sede del Comité Olímpico Español en rueda de prensa.

Nuria Fernández, actual campeona de Europa de 1.500 metros al aire libre, y Reyes Estévez comparecieron en calidad de "testigos" a principios de año en los tribunales y continuaron con su actividad deportiva. No así el mediofondista de origen etíope Alemayehu Bezabeh, que en junio fue sancionado por dos años. Según el Comité Español de Disciplina Deportiva, el pupilo de Manuel Pascua iba a someterse a una autotransfusión de sangre. En septiembre, la corredora de 100 y 200 metros Estela García, sin relación con el sumario aunque entrenaba con Pascua, daba positivo por un diurético. Pero la mayor víctima de esta redada contra el dopaje fue el exciclista de mountain-bike Alberto León, implicado en la operación y que apareció ahorcado en su domicilio el 10 de enero.

'Paquillo' Fernández y el atleta de 3.000 metros obstáculos José Luis Blanco han regresado este año a la competición tras cumplir, parcialmente, sus sanciones de dos años, reducidas a uno por su colaboración efectiva con las autoriadades, una medida que no ha contado con la aprobación de otros atletas. El marchador de Guadix, por otro lado, ha quedado libre de acusación penal en el sumario de la 'Operación Grial'. Ambos podrán participar en los Juegos Olímpicos de Londres, toda vez que en octubre pasado el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) anulaba la "regla Osaka", por la cual ningún atleta sancionado por más de seis meses podría participar en una olimpiada.

Contador y Mosquera

En ciclismo, Alberto Contador y Ezequiel Mosquera trazan caminos sin similitud alguna. El pinteño ha corrido este año y en noviembre finalizó la vista de su proceso ante el TAS, si bien el proceso se retrasó en varias ocasiones. Previsiblemente, el ganador del Giro de Italia 2011 conocerá el final de su caso de positivo por clembuterol del 15 al 20 de enero. Entre tanto, el gallego ha vivido un año en blanco, sin resolución en firme por su positivo en la Vuelta a España 2010 y sin poder competir con su nuevo equipo, el Vacans'oleil holandés, por las presiones de la Unión Ciclista Internacional. Las puertas que a uno se le han abierto al otro se las han cerrado y Mosquera, de 36 años, sopesa la retirada.

Riccardo Riccò iba a ser uno de los compañeros de Mosquera en el Vacans'oleil, pero el italiano volvió a coquetear con el dopaje. Una autotransfusión casera le provocó un bloqueo renal y tuvo que ser hospitalizado de urgencia. Ahora, la 'cobra' espera sanción -el CONI italiano pide 12 años-. En España, a finales de año la Guardia Civil llevaba a cabo una redada contra el dopaje en el deporte amateur, la 'Operación Master', cuyo centro eran varios exciclistas que se dedicaban al tráfico de sustancias ilegales.

El dopaje llegó también al fútbol, en forma de rumor infundado. La pasada primavera, el periodista de la Cadena COPE Juan Antonio Alcalá vertía unas acusaciones acerca de un presunto dopaje en la plantilla del Barcelona, una información que le había llegado de un "contacto directo del Real Madrid". El club que preside Sandro Rosell presentó una demanda judicial de "protección de derecho al honor y reclamación de daños y perjuicios" contra la emisora.

Un rumor similar afectó a la selección de baloncesto. Meses después de proclamarse por segunda vez consecutiva campeona del Eurobasket, un medio de comunicación lituano filtraba un presunto positivo por testosterona de un internacional español. La propia FIBA desmintió las informaciones del periódico Lietuvos Rytas, pero eso no frenó el escándalo por las declaraciones del extenista francés Yannick Noah.

En un artículo publicado en el periódico francés Le Monde, Noah afirmaba que España tenía la "pócima mágica", en una clara referencia al dopaje de los atletas al sur de los Pirineos, centrándose en la 'Operación Puerto'. Su hijo, Joakim, había perdido la final del Europeo de baloncesto contra la selección y, con su artículo, el otrora ganador de Roland Garros provocó la unión de todos los estamentos del deporte español para defender la limpieza de los éxitos de los últimos años.